RAMÓN BAYÉS
“Hay viejos de veinte años, como hay jóvenes de
ochenta” José Luis Sampedro
Ramón Bayés ha sido profesor de la Universidad Autónoma de
Barcelona durante varias décadas, habiéndose dedicado al campo de la psicología
de la salud en los ámbitos del cáncer, el sida, el envejecimiento y los
cuidados paliativos. Profesor emérito de la UAB, doctor honoris causa en Psicología por la UNED y colegiado de honor por
los Colegios Oficiales de Psicólogos de Cataluña y de la Comunidad Valenciana.
Además de numerosas publicaciones científicas y de divulgación, es autor de El psicólogo que buscaba la serenidad, Aprender a investigar, aprender a cuidar
y coautor de El dolor emocional, los
tres publicados también por Plataforma Editorial.
FOTO 1 Portada del libro y
fotografía de Ramón Bayés
Cada vez que Ramón sube al metro
o a un autobús, los pasajeros más jóvenes saltan de su sitio con gesto
altruista para cederle el asiento. Es inevitable: el autor acaba de cumplir
ochenta y cinco años, una edad en la que se puede parecer viejo a los ojos de
los demás…
Pero a Ramón la vejez no lo
desvela y a veces debe esforzarse para ser plenamente consciente de su edad.
¿Cómo lo hace? ¿Hay acaso alguna fórmula? ¿Está la verdadera naturaleza de la
vejez determinada por los números que sumamos? El autor parece haber encontrado
una feliz respuesta: mientras seamos autónomos y mantengamos siempre viva la
curiosidad, no hay razón para no despertamos entonando cada mañana el
triunfante grito de Tarzán.
Olvida tu edad es
el resultado de las reflexiones de un espíritu joven, vital y, sobre todo,
curioso. Y es también el recorrido de una mente generosa y erudita, capaz de
analizar con agudeza los más diversos temas, y que sabe lo que significa
envejecer bien, jubilarse, afrontar los problemas, sin dejar por ello de vivir
aquí y ahora.
El libro consta de una
introducción y lo divide en nueve capítulos. El primero titulado Fluir la vida
en la vejez. Segundo: La curiosidad y la creatividad en la vejez. Tercero:
Envejecer aquí y ahora. Cuarto: La jubilación como premio y como castigo.
Quinto: Afrontando problemas. Sexto: Sugerencias que pueden facilitar el buen
envejecer. Séptimo: Recorriendo el tramo final de la vida. Octavo: La
percepción del tiempo como medida de felicidad y sufrimiento y el último y
noveno: El final del viaje.
Algunas frases sacadas del libro:
“Son las pequeñas y silenciosas
muestras de afecto sin fecha ni obligación las que nos hacen sentirnos queridos
y nos ayudan a seguir adelante”.
“La satisfacción de la curiosidad
ha sido y continúa siendo una de mis principales recompensas a lo largo de la
vida”.
“Ana María Matute (…) manifestó
en una entrevista: “Soy feliz escribiendo, es mi forma de estar en el mundo; es
bonito pensar en el próximo libro que quiero hacer, me ayuda a vivir”.
“Envejecer es como escalar una
gran montaña: mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más
libre, la vista más amplia y serena”. Ingmar
Bergman
“Estar en flujo equivale a
percibir físicamente que estás vivo y que vale la pena continuar viviendo. Es
el plenamente ahora de cada persona”.
“Si quieres ser feliz a lo largo
de la vida, también en la vejez, nunca dejes de sorprenderte ni de seguir
preguntando”.
“El test de Turing fue diseñado
para poder contestar a una pregunta clave dentro del mundo de la inteligencia
artificial: “¿Puede una máquina pensar?”.
“Lo que creo que es al verdad es
solo mi verdad. La verdad no es objetiva con cosas que no puedes tocar ni
demostrar. Hay que pensar en la verdad de cada uno y la frontera me permite
tener mi verdad, pero a la vez aprovechar y gozar de la verdad ajena” José Luis Sampedro
“Si estuviéramos en otra época
histórica, este libro posiblemente nunca se habría escrito por una razón
sencilla. Envejecer, y todavía más, envejecer bien, era una rareza”.
“En el aspecto material, a pesar
de nuestras quejas y lamentaciones, los occidentales (…) todavía constituimos
un grupo humano privilegiado que sigue incrementando su longevidad”.
FOTO 2 Contraportada del libro y
biografía de Ramón Bayés
“El progreso de la educación, la
higiene y la medicina moderna han conseguido demorar la muerte de las personas
hasta el extremo de que muchas de ellas acaban su vida en nuestros modernos
hospitales a edades cada vez más avanzadas, aunque, es sí, aisladas, intubadas,
anónimas, alejadas de sus raíces familiares y culturales”.
“Solo una minoría afortunada
parece haber conseguido que el trabajo que lleva a cabo posea un valor
intrínseco”.
“La persona es el viaje, un viaje, siempre provisional,
único, irrepetible, irremplazable, continuamente cambiante, una biografía en
constante evolución desde que nace hasta que muere, en busca de la felicidad y
de la luz”.
“Cuando, de pronto, sentimos el peso de la vejez o la proximidad de la
muerte, solo son potencialmente capaces de ayudar: las presencias, el tacto,
los silencios acogedores, las palabras oportunas, el respeto, la validación de
una vida a la que se intenta encontrar sentido”.
“Cada persona mayor es un viaje,
siempre en curso mientras vivimos, siempre susceptible de cambio”.
“La jubilación no tiene por qué
significar para los seres humanos una frontera entre un antes que termina
abruptamente y un después prácticamente vacío”.
Sugerencias que pueden facilitar el buen envejecer
1.- Simplifica tu entorno.
2.- Practica actividades que
consigan absorberte plenamente.
3.- Enriquece tu vida
4.- Intenta ser apasionadamente
creativo
5.- Trata de vivir siempre con
atención plena e intensa saborear el ahora.
6.- De vez en cuando, si te
sientes pesimista, recuerda esta frase de Pilar Arranz: “Pasé la mitad de mi
vida preocupándome por cosas que nunca sucedieron”.
7.- Regálate momentos de
distanciamiento.
8.- En algún momento, reflexiona sobre este hecho de vida que es
la muerte.
9.- Ten siempre proyectos u
objetivos realistas pendientes.
10.- Permítete, si así lo deseas,
momentos de distracción.
11.- Lee buenos libros con
atención plena y contempla buenas películas con una mirada activa.
12.- Haz ejercicio regularmente.
13.- Sé generoso con los que te
rodean.
14.- Y, sobre todo, intenta
encontrarle sentido a tu vida.
Resumiendo: tal vez todo consista
en poder contestar a la pregunta: “¿Qué hace que tu vida siga valiendo la pena
aunque cada día seas más dependiente y conozcas el final que te espera?”.
“Sonreír te ayuda a afrontar el
día con amabilidad y sabiduría”. Thich
Nhat Hanh
“El proceso de morir forma parte
de la vida. Si somos conscientes de ello, siempre podemos finalizarla con una
mirada de ternura, agradecimiento, confianza y perdón”.
“Y tocaré el violín en las noches
de fiesta para los viejos que permanezcan vivos como yo después de la última
batalla”. Nazim Hikmet
Comentario
Este libro es un referente que invita al
pensamiento y a la reflexión de la vida de cada uno, y que puede ayudar a
comprender y vivir más felices.
Manuel Solórzano Sánchez
Diplomado en Enfermería. Servicio
de Traumatología. Hospital Universitario Donostia de San Sebastián. OSI-
Donostialdea. Osakidetza- Servicio Vasco de Salud
Insignia de Oro de la Sociedad
Española de Enfermería Oftalmológica 2010. SEEOF
Miembro de Enfermería Avanza
Miembro de Eusko Ikaskuntza /
Sociedad de Estudios Vascos
Miembro de la Red Iberoamericana
de Historia de la Enfermería
Miembro de la Red Cubana de
Historia de la Enfermería
Miembro Consultivo de la
Asociación Histórico Filosófica del Cuidado y la Enfermería en México AHFICEN,
A.C.
Miembro no numerario de la Real
Sociedad Vascongada de Amigos del País. (RSBAP)
No hay comentarios:
Publicar un comentario