miércoles, 25 de julio de 2007

Por fin han sido liberadas las enfermeras búlgaras en Libia


Libia anula la pena de muerte a las enfermeras búlgaras acusadas de infectar el VIH a niños
Las familias han recibido las
compensaciones económicas, más de 400 millones de euros

AGENCIAS EL MUNDO.ES
TRÍPOLI MADRID.- Finalmente, las cinco enfermeras búlgaras y el médico palestino acusados de un contagio masivo del VIH en un hospital infantil libio no serán ejecutados. La más alta instancia judicial del país, el Consejo Judicial Superior, ha conmutado la pena capital de los seis sanitarios por cadena perpetua, según han comunicado fuentes oficiales a AFP.
La decisión se produce horas después de que las familias de los niños libios afectados por el VIH comunicasen a esta instancia judicial que renuncian a la pena de muerte para las cinco enfermeras búlgaras y el médico palestino. Este paso debe desembocar en la extradición a Bulgaria de los seis cooperantes sanitarios, donde cumplirán la condena.
Este acuerdo era el requisito previo al pronunciamiento final de la justicia libia. Después de que el
Tribunal Supremo confirmase la semana pasada la pena capital, la suerte de los sanitarios condenados estaba en manos del Consejo Judicial Superior, un órgano controlado por el gobierno y que comenzó a reunirse este lunes para decidir si la condena se confirma, se anula o se conmuta. Libia ya había anunciado que la decisión de este órgano estaba a expensas de la compensación a las familias afectadas.
Las enfermeras búlgaras y el médico palestino fueron encarcelados en febrero de 1999, acusados de haber inoculado el virus del sida (VIH) a 426 niños libios cuando trabajaban en el Hospital de Bengasi. En mayo de 2004, fueron
condenados a muerte y, tras varios juicios, en diciembre de 2006 la pena fue confirmada.
Los acusados han mantenido que son inocentes y que fueron torturados para confesar. Algunos científicos occidentales (entre ellos, uno de los codescubridores del VIH) han señalado que la escasa higiene en el centro fue el origen real de la infección y que, de hecho, los contagios fueron anteriores a la llegada de los sanitarios al hospital libio.
La semana pasada, el Tribunal Supremo del país
confirmaba la pena capital para los seis sanitarios, de modo que su futuro quedaba a expensas de la decisión del Consejo Judicial Superior, un órgano controlado por el gobierno de Muamar Gadafi y dirigido por el ministro de Justicia.
El caso,
altamente politizado, ha puesto en peligro el acercamiento de Libia a occidente, después de tres décadas de ostracismo. Pero la resolución de las penas estaba también a expensas de las negociaciones con las familias de los niños afectados. Libia ya había anunciado que podría liberar a las enfermeras si se llegaba a un acuerdo sobre las compensaciones económicas a los padres.

Un millón por cada niño
El domingo la Fundación Gadafi, dirigida por el hijo del mandatario libio, anunció que las familias habían aceptado una compensación de un millón de dólares por víctima. Inicialmente, pedían una compensación de 13,3 millones de dólares (10 millones de euros) por cada pequeño. La ley islámica permite retirar sentencias de muerte a cambio de reparaciones.
De hecho, la reunión del Consejo Judicial Superior estaba prevista para el lunes por la mañana, pero fue pospuesta a la tarde a expensas de que los familiares firmasen un documento en el que aceptaban una indemnización a cambio de la renuncia a la pena capital, informa AFP. Los familiares se negaban a firmar cualquier documento hasta que no se hubiese hecho efectivo el pago.
Este martes por la mañana, fuentes oficiales libias han anunciado que las familias habían comenzado a recibir las compensaciones. La indemnización corre a cargo de un fondo internacional de asistencia a Libia para combatir el sida, que fue creado en 2005 por Bulgaria y otros países europeos.
Sin embargo, la Unión Europea (a la que Bulgaria se unió el pasado enero) ha rechazado en todo momento hablar de compensación, pues implicaría que los sanitarios fueron culpables, pero ha ofrecido un fondo para pagar el tratamiento futuro de los niños. Durante semanas, la UE ha mantenido negociaciones con las familias.
Christiane Hohmann, portavoz de la comisaria europea de Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, señaló que la Comisión Europea no ha estado implicada en las discusiones entre la Fundación Gadafi y los familiares, aunque subrayó que Europa continuará ayudando al tratamiento de los niños.
Asimismo, las enfermeras Kristiana Valtcheva, Nasia Nenova, Valentina Siropulo, Valia Tcherveniachka y Snejana Dimitrova, y el médico Achraf Yumaa tuvieron que firmar también una declaración por la que se comprometen a no reclamar del Estado libio dinero por los daños y perjuicios causados por los casi ocho años que han estado encarcelados en Libia.
Fuente: El Mundo

3 comentarios:

Eva dijo...

¿Son justas las compensaciones económicas a las familias de los niños contagiados?
Última hora: Hollywood ya está planteando hacer una películo sobre lo ocurrido por este equipo sanitario en Libia.

Eva dijo...

Los familiares de las víctimas condenan el indulto de las enfermeras búlgaras y piden que se las detenga de nuevo

Las familias de los niños contagiados por el virus del VIH en el hospital de Benghazi (Libia) han expresado su indignación por el indulto y la liberación de las cinco enfermeras búlgaras y el médico palestino a su llegada ayer a Bulgaria. Por su parte, El fiscal general búlgaro, Boris Velchev, rechazó la queja, afirmando en declaraciones a la agencia BTA que "no hay ningún problema legal con el estatus de los sanitarios".

Europa Press - MADRID, 26-07-2007.

karlfm dijo...

Todo esto es una patraña clara de los libios para sacar dinero. No tiene sentido que unos sanitarios y un médico extranjeros se dediquen a contagiar voluntariamente de sida a 400 niños. Los mas grandes expertos de sida del mundo afirman que la causa fueron las malas condiciones sanitarias de dicho hospital y que la sangre que se usaba en las transfusiones no pasaba ningún tipo de análisis previo; por lógica la responsabilidad de tal asunto es del ministerio de sanidad libio y de la gerencia del hospìtal de Bengasi. Los sanitarios búlgaros han sido simples instrumentos para sacar tajada del asunto, entre otras razones, es decir simples cabezas de turco que tras ser torturados brutalmente confesaron ser responsables. Todos sabemos que mediante la tortura uno es capaz de confesar cualquier cosa. Es una verguenza que paises que son cuna de terroristas, como Libia, chuleen de esta manera a una Union Europea. Detrás de todo esto siempre existen los malditos y crueles intereses económicos. PATETICO!!!!