jueves, 27 de marzo de 2014

UNA ENFERMERA EXCEPCIONAL. Mª LUZ FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ



PREMIO AL “MÉRITO PROFESIONAL DEL COLEGIO DE ENFERMERÍA DE CANTABRIA”

FOTO 001 Rosa Alonso Nates, supervisora de Nefrología; Mª Luz Fernández, Rocío Cardeñoso (Presidenta del Colegio de Enfermería) y Nives Bea, supervisora del Servicio de Radiodiagnóstico del Hospital U. Valdecilla

El Colegio Oficial de Enfermería de Cantabria, celebró el día de San Juan de Dios con más de 500 colegiados.

El día de San Juan de Dios, patrón de los enfermeros, se celebró el sábado con dos eventos a los que asistieron más de 500 colegiados de Cantabria. El Paraninfo del Palacio de la Magdalena fue el escenario del primer acto de la celebración: la entrega del Premio al Mérito Profesional, que este año ha recaído en la enfermera y profesora de la Escuela UniversitariaCasa de Salud ValdecillaMariluz Fernández, quien recogió la Medalla de Oro de la entidad colegial con enorme orgullo y tras ser presentada por sus compañeras Nieves Bea y Rosa Alonso, que precisamente recogieron el mismo reconocimiento el pasado año y el anterior, respectivamente.

Mariluz Fernández destacó la labor del colectivo enfermero y su vocación de cuidar a los demás, tanto en el ámbito hospitalario como en el docente, este último ejercido por la homenajeada desde 1988. Después de la emotiva entrega, el Colegio ofreció a los 340 asistentes al acto la obra de teatro “Toc, Toc”, interpretada por la compañía “La Vieja Escuela”, cuyo argumento se desarrolla en la consulta de un psicoanalista.

Posteriormente, se celebró la tradicional Cena de Hermandad del Colegio en la que enfermeros jubilados y colegiados con más de 25 años de antigüedad recogen insignias en reconocimiento a su carrera profesional, que en esta ocasión han recaído en 60 enfermeros de Cantabria.

FOTO 002 Junta Directiva del Colegio de Enfermería de Cantabria

La noche terminó con la entrega del premio de la II Edición del Concurso de Fotografía del Colegio de Enfermería, dotado con 250 euros, que recayó en Mar Crespo, enfermera que presentó a la convocatoria una instantánea de una acción solidaria en la que ella misma ha participado (1).

LA SOCIEDAD NO ES CONSCIENTE DE LA EVOLUCIÓN DE LA PROFESIÓN DE ENFERMERA (2)
Reproducimos el artículo del Diario Montañés:
Hace 25 años, la enfermera Mari Luz Fernández decidió cambiar el hospital por el aula para impartir y compartir la materia que más le apasiona. Por sus clases han pasado más de 2.000 alumnos, a los que ha querido transmitir la importancia de esta profesión que tiene en la humanidad y el cuidado personal su base y que se apoya en una formación cada vez más especializada. Licenciada en Historia por la Universidad de Cantabria, acaba de recibir el Premio al Mérito Profesional del Colegio de Enfermería por su trayectoria. «Me siento como si me hubieran dado un Óscar», dice, agradeciendo el gesto y las «numerosas muestras de cariño» que le han llegado en los últimos días.

¿Qué supone este premio para usted?
Lo he recibido con muchísima emoción. Ha sido una sorpresa, no me lo esperaba para nada. Estoy abrumada. Es un premio muy importante porque supone que tus compañeros de profesión reconocen tu labor.

FOTO 003 Mª Luz Fernández el día de su graduación en la Escuela de Enfermería Marqués de Valdecilla

¿Cuándo decidió colgar el uniforme para centrarse en la docencia y qué la impulsó a dar ese paso?
Yo siempre quise ser enfermera, es una profesión que ha formado parte de mi vida siempre. Tuve que hacer el primer curso en Palencia, porque no conseguí entrar en la Escuela Universitaria de la Casa de Salud Valdecilla, y después me trasladé a Santander. Empecé a trabajar en el Servicio de Hemodiálisis y fui muy feliz en aquella etapa. Dar el paso a la docencia fue algo repentino, no lo tenía en mi mente. Me planteé que así podía transmitir la importancia de la enfermería y de los pequeños detalles con el paciente, que a mí me transmitió Rosa Alonso, una supervisora que me marcó.

Y la asignatura que imparte es la de “Historia de la Enfermería”. ¿Qué etapa destacaría?
Me apasiona la enfermería, analizar los pasos que ha dado hasta el día de hoy, aunque tiene características y contextos que no son comparables. Disfruto en cada clase.

FOTO 004 Su marido Francisco Javier del Río Saiz (enfermero), Mª Luz Fernández y su hija Lara Del Río Fernández

Está preparando una tesis doctoral sobre la Escuela de Salud Valdecilla. ¿Porqué se centra en el periodo comprendido de 1929 a 1954?
En 1929 se inicia la escuela y 1954 es importante para la profesión porque es cuando España se integra en la Organización Mundial de la Salud y el país tiene que asumir nuevas directrices, que cambian las estructuras de su sistema sanitario. Es entonces cuando se unifican las tres titulaciones –practicantes, matronas y enfermeras– en una sola: ATS. Es el periodo que comprende los años de mayor impulso, unido a que se eleva el nivel de estudios y se aumentan los años académicos de 2 a 3, aunque la Escuela de Valdecilla siempre tuvo tres, lo que marca la diferencia con el resto.

Si se compara la formación de entonces con la de ahora, ¿cuál sale ganando?
Hay que tener en cuenta que cada etapa tiene circunstancias distintas. Los años 80 y 90 fueron de crecimiento y de ilusión, y eso repercute en todo. Ahora, que es el momento de mayor auge para la enfermería coincide con la crisis. Cuando más podemos aportar están los recortes por medio.

FOTO 005 Su amiga y compañera Amparo Puerta y Mª Luz Fernández

¿Cree que la profesión necesita hacerse visible?
Estamos muy valorados por la gente, pero no hemos sabido transmitir con claridad el rol que hemos tenido en los últimos años. La profesión sabe lo que ha evolucionado, pero la sociedad no es consciente. En ese sentido, sí necesitamos hacernos más visibles.

La crisis lleva a muchos enfermeros a irse de España.
¿Qué consecuencias tendrá esto en el futuro?
Me da mucha pena que un potencial humano y de calidad en el que hemos invertido se tenga que ir fuera, cuando realmente se necesitan profesionales de enfermería aquí. Me temo que esto va a repercutir negativamente y va a costar mucho retomar la situación. Nuestros enfermeros son muy apreciados en otros países por su alto nivel.

La enfermería ha ganado protagonismo, con nuevas competencias.
Sí, la enfermería está muy capacitada, aunque aún quedan muchos estereotipos del pasado. Trabajamos en colaboración con otras profesiones, en equipo, no bajo sus órdenes. Somos un colectivo muy preocupado por formarse continuamente, y eso la sociedad no lo percibe. Pinchar o curar es una parte más de la enfermería, pero establecer una buena comunicación con la persona que vas a cuidar también requiere técnica. La humanidad es la característica principal de esta profesión, hay cosas que no sustituye ninguna máquina.

¿Qué retos tiene por delante la enfermería?
Adaptarnos a un sistema de salud que va a cambiar, dar respuesta a nuevas necesidades y tener previsión de futuro. Tenemos que luchar para que haya una sanidad para todos (2).

FOTO 006 Junta Directiva del Colegio de Enfermería de Cantabria

CURRICULUM DE Mª LUZ FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ
Mª Luz Fernández Fernández, inicio sus estudios de A.T.S. en la Escuela de la Diputación de Palencia trasladándose en segundo curso a la Escuela “Casa de Salud Valdecilla donde concluyó su formación en 1978. En 1979 obtiene el título de Ayudante Técnico Sanitario de Empresa, y el de Diplomada en Enfermería por la UNED en 1985.

En el año 2000 concluye sus estudios de Licenciatura en Historia y los de doctorado, en el Programa de Historia Moderna y Contemporánea en el 2003. Asimismo, es Master Universitario en Historia Contemporánea por la Universidad de Cantabria.

Desde junio de 1979, hasta su incorporación a la Escuela de Enfermería en septiembre de 1988, desarrolló su actividad asistencial en el Servicio de Nefrología (Hemodiálisis) del Hospital U. Marqués de Valdecilla.

FOTO 007 Familia de Mª Luz Fernández

Desde 1988 es Profesora de la E.U.E. de la “Casa de Salud Valdecilla” de la Universidad de Cantabria, de la que fue nombrada Profesora Titular en Febrero de 1993, impartiendo docencia en la Asignatura de Enfermería Fundamental, posteriormente, Fundamentos de Enfermería y en la actualidad, Profesora responsable de la Asignatura Bases Históricas y Teóricas de la titulación de Grado en Enfermería.

Asimismo, ha realizado estancias de Investigación y Docencia en el extranjero destacando la realizada en el Centro de Estudios de Demografía Histórica de América Latina (CEDHAL), en Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias Humanas- Universidad de Sao Paulo, Brasil entre el 14 y el 22 de Septiembre de 2003 para impartir un Curso sobre Historia de la Salud.

Igualmente ha dirigido Proyectos de carácter internacional como la “Red Temática de Docencia: Estrategias de Intervención en Materia Socio-sanitaria” financiada por la  Agencia Española de Cooperación Internacional AECI, con una dotación económica de 15.025,3 euros, dentro Programa de Cooperación Interuniversitaria / E.AL.02. Redes Temáticas de Docencia del Ministerio de Asuntos Exteriores publicada en el B.O.E. en enero de 2003. En dicha Red, fue la Universidad coordinadora la U. de Cantabria y el resto de las Universidades participantes: Universidad de Valladolid (España); Universidad Autónoma de Madrid (España); Universidad Federal de Bahía, Salvador de Bahía (Brasil); Universidad Estadual de Feira de Santana; Feira de Santana (Brasil); Universidad (Colombia).

Entre otros méritos puede destacarse el haber sido Vocal de la Zona 2 (País Vasco; Burgos; Cantabria; La Rioja y Navarra) de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica desde 1982 hasta 1989. Asimismo, fue Miembro de la Comisión de Investigación del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla desde 1988 hasta 1996 y Miembro del Grupo de Trabajo de Investigación en Enfermería del Fondo de Investigaciones Sanitarias F.I.S.S.S. los años 1990 y 1991 (3).

FOTO 008 Amigos y compañeros al finalizar el acto de entrega del premio

A lo largo de estos años ha impartido numerosas Conferencias tanto a nivel nacional como internacional, y ha participado como Miembro de Comités Organizadores y Científicos en varios Congresos. Igualmente, ha presentado Comunicaciones científicas y publicado numerosos artículos tanto en revistas como en libros.

Publicaciones en Libros
Autor/es: Fernández Fernández Mª Luz
Título: Cuidados al paciente con alteraciones traumatológicas y ortopédicas
Capítulos: 1- Historia de la Enfermería Traumatológica
Ed. DAE. 2011
Páginas: 22-28

Autor/es: Fernández Fernández Mª Luz; Fernández Moral, Soledad
Título: La trasformación de la Enfermería Nuevas miradas para la historia
Capítulos: 1- La Escritora Vera Brittain, Enfermera en la I Guerra Mundial
Ed. Comares. 2010
Páginas: 183-202

Publicaciones de Congresos
Autor/es: Fernández Fernández, M. L.; Arce Castañeda, A: Notoria Benito; M.J.
Título: El Perfil profesional desde la óptica del usuario
Congreso: IX Conferencia Iberoamericana de Educación en Enfermería. I Encuentro Latinoamérica-Europa. Toledo, octubre 2007

Autor/es: Fernández Fernández, M.L.; Santos Abaunza, P.
Título: ¿Qué aporta la literatura española a la definición del perfil profesional?
Congreso: IX Conferencia Iberoamericana de Educación en Enfermería. I Encuentro Latinoamérica-Europa. Toledo, octubre 2007

Autor/es: Fernández Fernández, M.L.; del Río Saiz, F.J.; Bringas Elizalde, P.; Camus Diez, B.
Título: Perfil enfermero desde la óptica profesional y la perspectiva de género
Congreso: IV Congreso de Investigación Cualitativa. Universidad de Illinois en Urbana Champaign. Mayo 2008

Autor/es: Fernández Fernández, Mª Luz; López Maza, Raquel
Título: La trasmisión del conocimiento médico en la formación de enfermeras
Libro de Actas del XV Congreso de la Sociedad Española de Historia de la Medicina. Junio 2011
ISBN: 978-84-694-4266-1
Páginas: 595-599

Autor: Fernández Fernández, Mª Luz
Título: Desde Florence Nightingale a nuestros días
CD del 8è Congrés de L´Associació Catalana d´Infermería Pediàtrica. Vila-seca. 2011
ISBN: 978-84-694-2893-1

Autor/es: Torrijos Rodríguez I.; Herrero Avia, D.; Fernández Fernández, ML
Título: Estudio observacional de la higiene de manos.
Libro de Actas del XV Encuentro Internacional de Investigación en Cuidados, noviembre 2011.
ISBN 978-84-694-92
Páginas: 179-180

Autor/es: Fernández Fernández, Mª Luz; Camus Díez, Borja; López Maza, Raquel
Título: La Programación Neurolingüistica en el aprendizaje universitario.
CD del V Congreso Mundial de Estilos de Aprendizaje, junio 2012.
ISBN: 978-84-695-3454-0

Artículos Publicados en Revistas
Autor/es: Mª Luz Fernández; José Luis Callejo; Magdalena Santo Tomás
Título: “Arte de Cuidar a los enfermos”
Revista: Híades. Revista de Historia de la Enfermería
Fecha: Vol. I. Año 2008
Páginas: 331-337

Autor/es: Mª Luz Fernández; José Luis Callejo; Magdalena Santo Tomás
Título: “El Manual de la enfermera, del Dr. Carmelo Valls Marin”
Revista: Híades. Revista de Historia de la Enfermería
Fecha: Vol. I. Año 2008
Páginas: 339-346

Autor/es: Mª Luz Fernández; José Luis Callejo
Título: Tres cartas a una enfermera
Revista: Híades. Revista de Historia de la Enfermería
Fecha: Vol. I. Año 2008
Páginas: 347-351

Autor/es: Fernández Fernández, Mª Luz; López Maza, Raquel
Título: “Elizabeth Kenny, La inspiración de cuidar”
Revista Cultura de los Cuidados, 1er Cuatrimestre 2012. Año XVI, nº 32
Pág. 68-75
ISSN: 1138-1728

Autor/es: Martínez Cadaya, Nuria; Fernández Fernández, Mª Luz
Título: El rol enfermero. Cambios más significativos entre el Ayudante Técnico Sanitario y Diplomado Universitario en Enfermería.
Revista Cultura de los Cuidados, 2º Cuatrimestre 2012. Año XVI, nº 33
Pág. 22-29
ISSN: 1138-1728

Publicaciones digitales
Autor: Fernández Fernández, Mª Luz; Fernández Moral, Soledad
Título: Mary Seacole: La Nightingale Negra
ISBN 06-07-2007-00
Enfermería Avanza, octubre 2010. Páginas: 1-20. Disponible en:

Autor: Fernández Fernández, Mª Luz
Título: Una mirada a la Historia: La práctica de la Enfermería Oftalmológica
ISBN 06-07-2007-00
Enfermería Avanza, marzo 2011. Páginas: 1-12. Disponible en:

Autor: Fernández Fernández, Mª Luz
Título: Vera Brittain, Enfermera Voluntaria en la I Guerra Mundial
ISBN 06-07-2007-00
Enfermería Avanza, junio 2011-06-30. Páginas: 1-18. Disponible en:

Autor/es: Fernández Fernández, Mª Luz; López Maza, Raquel
Título: “Elizabeth Kenny, La inspiración de cuidar
ISBN: 06-07-2007-00
Enfermería Avanza, abril 2012. Páginas: 1-11. Disponible en:

FOTO 009 Grupo de amigos de Mª Luz Fernández

Conferencias
Autor/es: Fernández Fernández, M.L
Título: La primera experiencia de la profesión de Enfermeras “Labor de Todos”
Congreso: Jornada “Formación Profesional hacia la Atención integral”, organizada por el Instituto Especializado de Ecuación Superior de Profesionales de la Salud de El Salvador (I.E.P.R.O.E.S.). El Salvador, noviembre 2007

Autor/es: Fernández Fernández, M.L
Título: Desde la Formación de Enfermería ¿Motivamos hacia el liderazgo?
Congreso: Jornada “Formación Profesional hacia la Atención integral”, organizada por el Instituto Especializado de Ecuación Superior de Profesionales de la Salud de El Salvador (I.E.P.R.O.E.S.). El Salvador, noviembre 2007

Autor/es: Fernández Fernández, M.L.
Título: El Momento de la elección: ¿Por qué Enfermería?
Conferencia de Acto de Clausura de la E.U.E. “Fundación Jiménez Díaz”. Universidad Autónoma de Madrid, junio 2008

Autor: Mª Luz Fernández Fernández
Título: El Arte de Enseñar
Conferencia del XVII Seminario Español de la Asociación Europea de Enfermería Nefrológica EDTNA/ERCA
Santander, abril 2009

Autor: Fernández Fernández, Mª Luz
Título: Del saber al conocer: Metamorfosis en el cuidado
Conferencia Inaugural del VII Congreso Nacional de Informática en Enfermería. Ciudad Real, mayo de 2011.

Autor: Fernández Fernández, Mª Luz
Título: Desde Florence Nightingale a nuestros días
Conferencia Inaugural del 8 Congreso de la Asociación Catalana de Enfermería Pediátrica. Vila-seca. Tarragona, mayo de 2011.

En Mayo de 2013 asistió en Melbourne, Australia, al 25 Quadrennial Congress International Council of Nurses, donde presentó la Comunicación: Reflexionar sobre el pasado para construir el futuro: la formación universitaria.

En la actualidad se encuentra desarrollando su tesis doctoral “La Escuela de Enfermería de la Casa de Salud Valdecilla 1929-1954.

Excelente, magnífica, brillante y buena compañera, en cuatro palabras definiríamos a esta enfermera excepcional. Los compañeros y compañeras que quieran directamente expresarle sus enhorabuenas y felicitaciones por este merecido premio, lo podéis hacer a su correo electrónico: marialuz.fernandez@unican.es

Gracias Mª Luz por la pasión que pones en la enseñanza de nuestra profesión enfermera, por la ilusión con las que das tus clases y la cantidad de buenos enfermeros y enfermeras que han aprendido contigo y has conseguido formar para dar los mejores Cuidados Enfermeros.

BIBLIOGRAFÍA

1 Colegio Cantabria

2 El Diario Montañés, lunes 17 de marzo de 2014

3 Curriculum Vitae

4 Vídeos de la entrega del premio y de una entrevista


 
FOTO 010 Manuel Solórzano y Mª Luz Fernández. Santander 2009

Manuel Solórzano Sánchez
Enfermero. Hospital Universitario Donostia de San Sebastián. Osakidetza /SVS
Colegiado 1.372. Ilustre Colegio de Enfermería de Gipuzkoa
Miembro de Enfermería Avanza
Miembro de Eusko Ikaskuntza / Sociedad de Estudios Vascos
Miembro de la Red Iberoamericana de Historia de la Enfermería
Miembro de la Red Cubana de Historia de la Enfermería
Miembro Consultivo de la Asociación Histórico Filosófica del Cuidado y la Enfermería en México AHFICEN, A.C.
Miembro no numerario de la Real Sociedad Vascongada de Amigos del País. (RSBAP)


jueves, 20 de marzo de 2014

CONDUCTA PERSONAL DE LA ENFERMERA 1937



En la formación de Enfermeras, como en todo lo que con la Medicina se relaciona, la práctica del ejercicio y la preparación de la técnica son factores de análoga equivalencia. Ambos órdenes de conocimientos deben adquirirse simultáneamente, y en lo concerniente a los textos de estudios, es preciso no olvidar que en su simplicidad está todo su mérito y valor didáctico.

FOTO 001 Portada Guía de Enfermeras. Dr. Mario Oliveras Devesa

Nuestra experiencia personal en la organización de cursillos para Enfermeras y auxiliares clínicos, nos ha hecho ver que a las futuras enfermeras no se las debe someter al estéril esfuerzo de aprender nombres técnicos, teorías discutidas y conocimientos innecesarios que son para ellas una verdadera tortura, sino que interesa inculcarles el sentido clínico, sin complicaciones anatómicas no disquisiciones doctrinales.

He aquí, pues, la finalidad de este volumen; damos en él lo justo, lo preciso, lo que estimamos esencial en la vida clínica y en el trato diario de enfermos, procurando que sus capítulos, convenientemente expurgados, tengan contenido substancioso y sean de agradable lectura y constante utilidad. San Ildefonso, julio de 1937. II año triunfal.

FOTO 002 Manera de cambiar la ropa de la cama sin levantar al enfermo. Aparato de Braun modificado para la inmovilización y extensión continua. Mascarilla de anestesia “Ombredanne”. Compesión circunferencial de un miembro para cohibir una hemorragia.

Significación e importancia de los servicios auxiliares en la práctica médica
Los servicios auxiliares de la medicina son, en realidad, el complemento de ésta, y si bien es verdad que en épocas pretéritas fueron poco menos que desdeñados por conceptuarlas de categoría inferior, hoy, que el personal dedicado a ellos posee las aptitudes y conocimientos que son indispensables para el ejercicio de esta noble profesión, se estiman en su justo valor y se les tiene por un valioso factor, dándoles el alcance, extensión y dignificación que realmente tienen.

En la lucha contra las enfermedades y la muerte, el personal clínico subalterno desempeña un importantísimo papel, llevando a cabo, con su pequeño pero constante esfuerzo personal, una positiva labor bajo el doble aspecto moral y científico. El Practicante y la Enfermera son el brazo ejecutivo del médico, y su misión, si bien no de tanta responsabilidad como la de éste, no es menos importante, porque supone la estricta observancia de muchas indicaciones que tienen gran trascendencia como elemento curativo.

La mujer es, en la vida clínica, un elemento insustituible, dado el singular matiz de feminidad que preside siempre sus actos.

Sus peculiares cualidades de habilidad manual, orden, pulcritud, etc., la hacen insustituible en el cuidado de enfermos, y de ahí que en todos los países y en las mejores clínicas se la utilice ventajosamente en estos menesteres.

La Enfermera de hoy (1937), convenientemente preparada para el ejercicio de su cargo, tiene una vasta cultura no sólo de orden médico, sino también general, y es, por tanto, un eficaz colaborador del facultativo, bien diferente de la enfermera de antaño con escasos conocimientos técnicos y una rudimentaria cultura que, en verdad, no la permitía más que velar los enfermos, pero no cuidarles y atenderles desde un punto de vista profesional.

FOTO 003 Ligadura de un vaso que sangra.
Aplicación de ventosas por medio de la llama. Ventosa provista de pera de goma, se aplica en frío. La del centro produce la succión mediante la bomba de aspiración. La última actúa por medio de llama.
Termocauterio de Paquelin; Una vez puesta al rojo, con el auxilio de la llama, la punta de platino se mantiene la incandescencia, mediante la insuflación de vapores de gasolina contenida en el frasco.

Guía de la Enfermera
El cuidado del enfermo requiere un riguroso aseo personal y la continua observancia de las normas elementales de higiene, con la doble finalidad de no contagiarse sus males y de no difundir, por contaminación, procesos infecciosos de fácil contagio.

La enfermera debe comenzar por si misma guardando una absoluta limpieza corporal, en jabonándose las manos cuantas veces lo requiera su contacto directo con los pacientes; deberá llevar las uñas recortadas, cepillando diariamente sus intersticios; tampoco debe descuidar la higiene bucal, enjuagando su boca con algún líquido antiséptico, evitando así posibles fuentes de contagio.

La indumentaria que use durante sus horas de trabajo quedará en el cuarto de aseo de la clínica u hospital o del domicilio de su cliente, y cuando sea preciso retirarle para lavar, la envolverá convenientemente y no la pondrá jamás en contacto con la ropa y prendas de uso habitual, procurando que el lavado sea a base de lejía.

FOTO 004 Inyección intravenosa. Colocación de la lanceta para producir una sangría.

En la asistencia de los pacientes confiados a ella, procurará extremar sus atenciones, procediendo con la máxima amabilidad, pero sin dejar jamás incumplidas las prescripciones del doctor; debe esmerarse en vencer la resistencia propia del enfermo a la supeditación del régimen clínico con palabras persuasivas, imponiendo suavemente y con toda discreción su autoridad.

Con los familiares y visitantes de los hospitalizados guardará la natural reserva, absteniéndose de contestar correctamente a las preguntas indiscretas que sobre el curso y naturaleza de la dolencia suelen formular aquéllos.

El cuidado de los enfermos
Nunca debe abandonar a los que están bajo su cuidado, alejándose de ellos lo menos posible para acudir a su menor indicación, cuidando que la cama esté siempre limpia y ordenada, que la luz no moleste al enfermo, que se guarde silencio a su alrededor, que los visitantes no fumen ni abusen de la conversación, en una palabra, no olvidando jamás que está ejerciendo una delicada misión y que se ha de rodear al enfermo de un ambiente de disciplina y seriedad.

FOTO 005 Esqueleto humano. Lavado de estómago: con el embudo en alto, introduce el líquido en el interior, al descenderlo hacia el cubo, vacía el estómago. Esta maniobra debe repetirse varias veces. Pantostato para exploración y aplicaciones eléctricas. Vendajes: Vendaje circular. Vendaje recurrente del munón del muslo. Vendaje en espiral. Vedaje cruzado de pie en estribo y Espica de ingle.

Es indispensable a toda enfermera un pequeño libro de notas en el que señalará con precisión matemática las instrucciones dadas por el doctor en lo concerniente a las horas y género de alimentación, medicación, tomas de temperatura y pulso, etc.

Cuantas novedades aprecie en sus enfermos las anotará convenientemente para ponerlas en conocimiento del médico, haciéndose respetar y querer cual corresponde a la alta misión que le está confiada.

Téngase presente que esta profesión es, como al Medicina, un verdadero sacerdocio, y requiere, por parte del que la practica, auténtica vocación y espíritu de sacrificio. Muchas veces puede la enfermera, en sus breves conversaciones con los enfermos, elevar su moral y vencer los estados de depresión que tan a menudo les embargan, pues si el sanitario desgraciadamente no puede curar al enfermo, puede, por lo menos, aliviarle y debe siempre consolarle, mejorando su estado de ánimo.

El arreglo de la cama
La naturaleza de la enfermedad o lesión obliga a variar las condiciones de la cama; entre un enfermo de corazón que ha de estar sentado o incorporado, un hemorrágico cuya cabeza ha de estar baja, un fracturado cuya cama conviene que sea dura, etc., hay grandes diferencias, pero en general debe procurarse que sea de hierro, moderadamente dura, con bastante ropa para que, sin agobiar, evite los enfriamientos siempre peligrosos; las ropas deber ser suficientemente anchas para impedir que al más ligero movimiento del enfermo quede alguna región al descubierto.

La cama, a ser posible, debe estar colocada de manera que, apoyando la cabecera junto a la pared, pueda circularse libremente por los otros tres lados, y no debe ser demasiado alta ni muy ancha para que sea más fácil la asistencia.

Para hacer la cama se aprovechará siempre el momento en que el enfermo se levante para la cura, ir al lavabo, esté unas horas sentado en la galería, o tenga autorización para pasear por el jardín, y se rehará la cama ahuecando los colchones y almohadas, procurando no hacer aire que pueda perjudicar a los enfermos contiguos.

Cuando por la naturaleza de la dolencia el enfermo no puede abandonar el lecho, el arreglo de la cama y el cambio de ropas se hace con las debidas precauciones a fin de no enfriarle. Para estas operaciones precisan dos personas, una a cada lado de la cama, por lo que, como hemos dicho, debe de estar colocada de manera que pueda pasarse por los dos lados; se principia por quitar la sábana de abajo, por lo cual, tomando cada una de las enfermeras una de las puntas o ángulos superiores de la sábana, la va corriendo por debajo del dorso hasta llegar a los muslos; inmediatamente se coloca transversalmente en la cabecera la sábana que vamos a poner y que previamente ha sido arrollada como los globos de venda, se sujeta el borde superior y se va poco a poco desarrollando hasta llegar al punto donde quedó la otra, que se quita por completo y se concluye de despegar la nueva. Todo ello se practica por debajo de las ropas sin necesidad de descubrir al enfermo.

Otro procedimiento que aconsejamos para renovar la sábana sin necesidad de levantar al enfermo, consiste en que éste se corra hacia el borde de la misma y por el lado opuesto se retira aquélla, recogiéndola junto al paciente a lo largo de su cuerpo; por este mismo lado se pone ya la nueva, previamente arrollada, que se deja extendida hasta donde lo permita la superficie del lecho. Luego no hay más que ordenar al paciente que se pase al lado contrario, es decir, al que tiene puesta la nueva sábana, y se continúa la operación por el lado opuesto con absoluta facilidad. Este proceder tiene la ventaja de que puede realizarlo una sola persona.

La muda de la ropa de la cama conviene que esté perfectamente seca, ya que, de conservar humedad, resulta muy desagradable y perjudicial, singularmente si el paciente está frebicitante. A ser posible, la nueva ropa debiera calentarse inmediatamente antes de su colocación.

FOTO 006 Manera de cambiar la ropa de la cama sin levantar al enfermo. La enfermera debe tener la precaución de desdoblar antes sobre una mesa la sábana que va a colocar, arrollándola seguidamente por su orilla larga. En el momento de efectuar el cambio, conviene quitar la almohada con objeto de facilitar la maniobra.

El cambio de la sábana superior es más sencillo y se verifica comenzando por levantar las ropas por los pies de la cama, dejando un instante al descubierto las extremidades, y seguidamente se coloca la nueva, que se sube por debajo de la vieja hasta llegar a cubrir la cabeza; con suma facilidad se retira ésta y queda renovada la cama.

Algunas veces ocurre que por permanecer mucho tiempo los enfermos en decúbito supino (boca arriba) y particularmente si existe suciedad y humedad en la cama, se forman en las nalgas las llamadas úlceras por decúbito, que debe la enfermera evitar cuidando que las ropas estén siempre estiradas sin hacer arrugas, lavando las nalgas con agua fría y espolvorearlas con polvos de talco; si hay incontinencia de orina, se le dejará colocado el orinal, y si es de materias fecales, gran cantidad de algodón que se separa con frecuencia, limpiando la región; siempre que sea posible se hará cambiar de postura. Si llegan a producirse úlceras, se curan antisépticamente, y al talco pueden unirse los polvos de quina, y se utilizan los cojines neumáticos circulares cubiertos por un paño para apoyar las nalgas.

FOTO 007 Práctica de hidroterapia por el método de la sábana mojada.

Arreglo de la habitación
Los pacientes hospitalizados en clínicas, hospitales o sanatorios, con habitaciones individuales o salas para grupos pocos numerosos, han de sentirse rodeados de un ambiente atractivo. Se desterrará todo mobiliario que no sea necesario, particularmente visillos, cortinas, biombos, etc.; en general, son suficientes una o dos sillas, una mesa y mesilla de noche cubiertas por paños blancos y limpios, sin que quiera decir esto que se convierta la habitación del enfermo en una celda destartalada, sino procurar revestirla de cierta alegría.

Las mesillas de noche deben ser descubiertas, estando a la vista el vaso de noche, siempre limpio y cubierto, conteniendo una pequeña cantidad de una disolución antiséptica; si el orinal no tiene tapadera, se recubrirá con un paño blanco cada vez que tenga que retirarse para vaciarlo.

Las puertas y ventanas, además de ajustar bien, no deben producir ruido al abrirlas o cerrarlas, pues no hay nada tan molesto como el chirrido especial de los hierros oxidados o mal engrasados que tan frecuentemente despiertan a los enfermos, y no debe olvidarse que el sueño es un factor importantísimo que debe respetarse siempre con la máxima atención.

La ventilación puede ser natural o artificial; la primera es la producida por la abertura de puertas y ventanas, debiendo evitarse el establecimiento de corrientes y que éstas lleguen al enfermo, pudiendo ser motivo de enfriamientos, siempre perjudiciales, tratando de evitarlos abrigándoles convenientemente; entre los medios de aireación indirecta dan excelentes resultados los cristales basculantes, colocados en la parte superior de las ventanas, y mejor que esto los dobles cristales paralelos incompletos.

La iluminación natural debe ser abundante, procurando que el sol penetre libremente sin molestar a los enfermos, ya que está recocido como poderoso germinicida, y de aquí el antiguo adagio: “Donde no entra el sol entra el médico”.

La iluminación artificial ha de ser llamada indirecta, con instalaciones y pantallas especiales, de forma que el foco luminoso no alcance directamente la vista del enfermo, y durante la noche se mantendrá una luz tenue que no dificulte el sueño y permita actuar a la enfermera.


FOTO 008 Respiración artificial por el método de Sylvester, Primer tiempo; Segundo tiempo. Asfixia. Respiración artificial Método de Schoefer.

La limpieza de la habitación debe ser esmerada, sin levantar polvo, con el que podrían difundirse los gérmenes, por lo que debe realizarse con paños humedecidos, serrín húmedo o fregando ligeramente el pavimento, procurando no derramar un exceso de agua que daría lugar a exagerar la humedad de la atmósfera respirable, que es perjudicial para los pacientes. Es más práctico e higiénico el empleo de los modernos aparatos eléctricos de limpieza denominados aspiradores.

Debe la enfermera cuidar de que en todo momento la enfermería de impresión de limpieza y orden. Es muy desagradable entrar en una sala hospitalaria que huela a medicación o al aire viciado, y para evitar esto, renovará el aire dos veces al día y desinfectará la atmósfera mediante pulverizaciones de líquidos antisépticos y ligeramente aromáticos.

Vida Clínica
Antes de la visita, la enfermera procurará que todo esté en orden para la llegada del médico, teniendo dispuesto el instrumental, pinzas de curación, etc., que crea han de ser necesarios tanto para el reconocimiento como han de ser necesarios tanto para el reconocimiento como para la curación de los enfermos.

En las salas de Cirugía tendrá dispuesto los instrumentos de exploración y cura (tijeras, pinzas, estiletes, sondas y bisturies, etc.). En las salas de Medicina son principalmente los medios de reconocimiento, como el estetoscopio y el fonendoscopio, para la auscultación; plexímetro y martillo percutidor, para la percusión; termómetro, sondas, tubos de ensayo, etc.

Durante la visita cumplirá con diligencia las órdenes del médico; fijará bien su atención en las prescripciones, sin omitir detalle, pidiendo, con el respeto debido, aclaraciones cuando no entienda lo ordenado, e ilustración cuando, habiéndolo entendido, dude saber cumplir; todo antes que dejar incumplido lo dispuesto o cumplirlo mal.

Debe llevar siempre consigo su libreta de notas, la estilográfica y un reloj con minutero para la toma del pulso y horario de medicación.

Al ejecutar los actos, debe de hacerlo con precisión, sin apresuramiento ni vacilación, demostrando en todos sus movimientos que tiene perfecto conocimiento de lo que está efectuando, cuidando que todo esté a tiempo y que nada falte, recordando que la dulzura y honradez en el trato llevan consigo la confianza del enfermo. Será bondadosa de carácter y alegre; la demasiada seriedad es inconveniente para adquirir la estimación de los pacientes; sin embargo, la alegría natural no ha de convertirse en un exceso de confianza que pudiera dar lugar a ciertas libertades de las que la buena enfermera debe huir, así como de la presunción en el vestir, debiendo hacerlo con honestidad y sin exhibición de joyas; en su aseo personal, en el que ha de poner gran cuidado, debe desechar los afeites y perfumes exagerados.

TODAS LAS ENFERMERAS TENÍAN QUE APRENDER:
Nociones de higiene y bacteriología. La asepsia y la antisepsia. Medios de esterilización. Elementos de anatomía y fisiología. El cuerpo humano. Miología. Aparato circulatorio, respiratorio, digestivo y urinario. El sistema nervioso. El aparato sensorial: los sentidos del tacto, gusto y olfato. Sentido de la vista. Sentido del oído. Principios de biología. Práctica clínica: la conducta personal de la enfermera. Concepto y clasificación de las heridas. Medicación tópica de las lesiones. La primera cura de los lesionados. La cura provisional de los heridos. La cura provisional de las lesiones profundas. Práctica del vendaje. Quemaduras. Luxaciones y fracturas. La anestesia en cirugía. La hemorragia. Transfusión sanguínea. Fiebre. Elementos de terapéutica. Generalidades sobre la fisioterapia. Hidroterapia. La envoltura húmeda. Helioterapia, electricidad médica, radium y radioterapia. Masoterapia

FOTO 009 Libro Técnica Clínica Auxiliar “Guía de Enfermeras”. Dr. Mario Oliveras Devesa

Medios terapéuticos auxiliares. Lavado del estómago. Enemas alimenticios. Técnica de las inyecciones. Inyecciones hipodérmicas. Inyecciones intramusculares. Inyecciones intravenosas. Inhalaciones, sangrías y otras prácticas sanitarias. Pincelaciones en la garganta. Aplicación de pomadas oftálmicas. Revulsivos. Vejigatorios. Escarificación. Ventosas. Ventosas escarificadas. Botones de fuego. Fomentos. Cataplasmas. Calor seco.

Los regímenes dietéticos en clínica más corrientemente empleados son los siguientes: Régimen hídrico. Régimen lácteo. Régimen lácteo mitigado o lacto-vegetariano. Régimen hidrocarbonado prolongado. La dieta de sobrealimentación. La alimentación durante los procesos febriles.

Preparación del enfermo para una operación. Preparación de estado general. Cuidados post operatorios. Delirio. La asfixia. Concepto de la inmunidad. Cómo se recogen los productos biológicos y cómo se remiten al laboratorio.

BIBLIOGRAFÍA
Técnica Clínica Auxiliar. Guía de Enfermeras por el Dr. Mario Oliveras Devesa. Director de Orientación y Selección Profesional del Instituto de Prótesis y Reeducación de Mutilados. Oficial Médico de Sanidad Militar, Académico, laureado con la Fundación Röel. Ilustraciones F. Marco. Manuel Marín, Editor. Depósito y venta: Librería de Paulino Ventura Traveset, Granada. 1937, II año.

Manuel Solórzano Sánchez
Enfermero. Hospital Universitario Donostia de San Sebastián. Osakidetza /SVS
Colegiado 1.372. Ilustre Colegio de Enfermería de Gipuzkoa
Miembro de Enfermería Avanza
Miembro de Eusko Ikaskuntza / Sociedad de Estudios Vascos
Miembro de la Red Iberoamericana de Historia de la Enfermería
Miembro de la Red Cubana de Historia de la Enfermería
Miembro Consultivo de la Asociación Histórico Filosófica del Cuidado y la Enfermería en México AHFICEN, A.C.
Miembro no numerario de la Real Sociedad Vascongada de Amigos del País. (RSBAP)