LA INFLUENCIA DE TEORIAS Y MODELOS DE ENFERMERIA EN LA HISTORIA DE ENFERMERÍA EN EL HOSPITAL UNIVERSITARIO DEL VALLE "EVARISTO GARCIA" EMPRESA SOCIAL DEL ESTADO. CALI COLOMBIA
Autora de este trabajo es la enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
A inicios de los años 80, se me da la gran oportunidad de iniciar mis estudios de Enfermería en la Universidad del Valle, aula máxima que me inspiraba y motivaba a ser partícipe de su experiencia pedagógica. Aún en pleno desarrollo de mi adolescencia inicie mis estudios y mi meta fue siempre ser una Excelente Enfermera, en todos los aspectos de la integralidad del ser humano, que con mucho amor y serenidad me habían trasmitido mis padres.
FOTO 001 Enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
Terminé mis estudios de pregrado, con desempeños muy buenos. Inicie la etapa de año rural, lejos de casa, enfrentándome a situaciones de violencia en el Municipio de Trujillo que muy hábilmente fui enfrentando y fui valorando para mi desempeño profesional. En el año 1988 inicie mi desempeño como profesional en el Hospital Universitario del Valle, “Evaristo García”, E.S.E, entidad hospitalaria que ha permitido vivir mi crecimiento personal y profesional por el bienestar propio y de todos aquellos que han sido mis pacientes, compañeros, usuarios, jefes, amigos, docentes, etc.
FOTO 002 Diferentes fotos del Hospital Universitario del Valle
Mi meta hacia la excelencia en Enfermería se inicia con la realización de los estudios de actualización y postgrados, realizando especializaciones, diplomados, seminarios, congresos, pasantías, ponencias, a nivel nacional e internacional. He sido una esmerada y apasionada estudiante de post grados de la Universidad del Valle, Universidad Libre, Universidad Santiago de Cali, Universidad de Antioquia, Universidad Javeriana, cada una de ellas fueron aportando y ampliando mi campo cognitivo en el cuidado integral del ser humano, desde la perspectiva física, humana, emocional y social del individuo. Estos encuentros con el conocimiento fueron perfilando mi actuar hacia la Gerencia del Cuidado y la Donación y el Trasplante de Órganos, Tejidos y Células. Campo ampliamente estudiado que me ha permitido compartir escenarios y experiencias como el realizar mis estudios en Estados Unidos, España (en 2 ocasiones), Argentina, Panamá, París y Londres donde pude cumplir mi gran anhelo de visitar el “museo de Florence Nightingale”.
Hoy, después de 24 años de egresada de la Universidad del Valle y de 22 años de trabajo en el HUV. Con eterno agradecimiento a Dios, mi madre, esposo e hijo, por permitirme ser la persona y enfermera que he querido ser.
TRABAJO. HISTORIA DE ENFERMERÍA DEL HOSPITAL
Desde la antigüedad los conceptos del cuidado de los enfermos, ancianos, personas desvalidas o débiles y minusválidas junto con la promoción de la salud han sido los pilares del concepto de enfermería. Enfermería ha sido denominada la mas "antigua de las artes y la mas joven de las profesiones, su historia ha sido modelada por los conceptos del cuidado de las personas evidenciados en cada momento en que ha tenido que actuar para sostenerse como parte vital de la sociedad", no obstante su desempeño y formación académica se ve afectado por cada momento histórico en particular: la estructura económico-político, las organizaciones de poder, los conflictos nacionales e internacionales, los papeles del género femenino y de clase social, los avances científicos, tecnológicos y técnicos, el sistema educativo y de salud, las diferentes categorías socio-profesionales y las propias metas de desarrollo de la profesión han sido determinantes en la evolución que hasta el momento actual han logrado nuestra profesión.
En el año 1938 se crea la ordenanza de construcción del Hospital Universitario del Valle y en 1948 se reconoce la personería Jurídica al Hospital Universitario del Valle por el Ministerio de Justicia y en enero de 1956 se abre el más grande centro de salud para la comunidad vallecaucana y centro de práctica de estudiantes de medicina y de enfermería de la Universidad del Valle. Esta nueva concepción de organización como centro docente asistencial de la salud, hace de la formación de Medicina y Enfermería disciplinas entrelazadas por su complementariedad y ciencias.
En 1903 se inician las primeras Escuelas de Enfermería en Colombia, en 1945 inicia su andadura la Escuela de enfermería de la Universidad del Valle. En 1952 con el empuje y visión de directivas del Valle como el Dr. Gabriel Velásquez Palau y la enfermera Judith Dueñas (egresada de la Universidad Nacional de Colombia), se inicia la formación del segundo grupo de enfermeras profesionales en un edificio de albergue del Club de Leones que lo tenían destinado para niños huérfanos, este edifico tenía grandes pasillos, ambiente rodeado de naturaleza y aire fresco por cercanías a la cordillera de la ciudad (hoy Parque Nacional Natural Farallones de Cali), en el primer piso tenía las aulas de clase y un salón de práctica para procedimientos de enfermería básica, en el segundo piso las habitaciones de las estudiantes y de las profesoras, que hicieron del estudio, la disciplina, respeto y vida espiritual los valores que fundamentaron la convivencia y formación. Este edificio fue donado a la Universidad del Valle con el objetivo de “preparar a las mujeres jóvenes entre 18 y 30 años para prestar ayuda a la familia y a la sociedad en prevención y curación de la enfermedad”, este inmueble hasta la fecha se conserva como Facultad de Odontología de la Universidad del Valle.
En el paradigma empiricista, el conocimiento de enfermería se desarrolla a partir de la observación del mundo natural para verificar y justificar teorías que describen, predicen y prescriben. Fue difícil para el grupo de enfermeras formadas de la época ir a la universidad, cuando la mujer estaba relegada a ir al colegio y prepararse para las labores de hogar, sin embargo, la motivación del conocimiento de la ciencia les hizo disfrutar del internado de la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle por tres años, tiempo en el cual sólo visitaban a sus padres el fin de semana, que a pesar de los momentos de la sociedad caleña, pagaban con orgullo los $30 mensuales a la universidad.
El plan de estudios comprendía una fase preliminar de 4 semanas, donde se buscaba en la estudiante las aptitudes y capacidades para desarrollar su vida profesional. En el primer año las materias eran anatomía y fisiología, parasitología y bacteriología, ética y orientación profesional, nutrición y salud, materia médica, drogas y soluciones, psicología, sociología, legislación sanitaria, primeros auxilios, masajes y vendajes, bioquímica. En el segundo año, cirugía general, medicina general, obstetricia, psiquiatría, ginecología, dietética, ortopedia, endocrinología, artes de enfermería relacionada a cada materia y finalmente en el tercer año anestesia, neurología, dermatología, salud pública, administración de salas y prácticas hospitalarias en cada uno de los servicios.
FOTO 003 Escuela Universitaria de Enfermería del Valle
Desde la formación como estudiantes de enfermería, las futuras Enfermeras que se iniciarían en el hospital, trascendieron de modelos no autónomos a un “modelo conceptual que se aplicará en un currículo con los lineamientos generales de los contenidos y de las estrategias enseñanza-aprendizaje que debían emplearse, y otorgar una visión particular a la educación en Enfermería”. Jackeline Fawcett sostiene que la estructura curricular y los procesos educativos se especifican en 5 reglas que son inherentes a cada modelo conceptual, la primera identifica el enfoque distintivo del currículo y los propósitos que deben abarcarse con la educación de enfermería, el segundo identifica la naturaleza general y la secuencia del contenido que será presentado, la tercera identifica los escenarios en los cuales ocurrirá el proceso educativo, la cuarta regla identifica las características de los estudiantes y la quinta las estrategias de enseñanza aprendizaje que se utilizarán. Los fundamentos teóricos del currículo contemplaron las teorías de las ciencias básicas, de las ciencias humanas y de la educación, así mismo establecieron indicadores empíricos, experiencias clínicas y tareas adecuadas que les permitieron alcanzar los fines propuestos en el proyecto educativo del programa de enfermería implementado por la Universidad del Valle y factor determinante para iniciar la puesta en marcha de modelos y teorías en el cuidado de los pacientes en el Hospital Universitario del Valle. “Evaristo García”. Empresa Social del Estado.
Una anécdota de la época descrita por la enfermera Bertha Franco señala que el primer día de prácticas al ingresar el grupo de estudiantes por la puerta principal del Hospital San Juan de Dios, sitio de prácticas mientras se construía el Hospital Universitario del Valle. Todos los pacientes tanto hombres como mujeres habían formado una fila larga, donde manifestaban la oposición al ingreso de mujeres enfermeras, ellos querían la atención por las monjas o “hermanitas”, así ellas no fueran formadas en la universidad.
El modelo de Ernestine Wiedenbach, facilitó el articular los conceptos teóricos de éstas enfermeras a la práctica del cuidado del paciente en el hospital y la enfermera se fue perfilando como la persona funcional que actúa, piensa y siente para otra persona que necesita ayuda y para lo cual se requería de un “conocimiento sólido de los estados normales y patológicos del paciente, una completa comprensión de la psicología humana, tener competencias en habilidades clínicas y la capacidad de iniciar y mantener una comunicación terapéutica con el paciente y su familia a la vez que desarrollaba un juicio clínico coherente para tomar las decisiones sobre el cuidado del paciente y para interpretar la conducta del paciente”. Se inició entonces la ciencia del cuidado de enfermería y se deja de un lado pero sin restar importancia, la influencia de las Órdenes religiosas de enfermería.
En el Hospital Universitario del Valle, las Órdenes religiosas de Hermanas de la Caridad fundadas por San Vicente de Paul en momentos en que la miseria y la enfermedad causadas por las guerras estaban aniquilando a Francia (finales de la edad media), fueron motivaciones para cuidar a los enfermos en el ámbito de la religión y no en el de la ciencia o en el de la técnica; quedando por tanto el cuidado como acto de solidaridad humana, vinculado históricamente a la religiosidad y a la abnegación, sin embargo, estas tendencias religiosas influyeron en el hospital en crear modelos de enfermería domiciliaria, ya que muchas personas de la comunidad acudían voluntariamente a colaborar con las actividades de los cuidados a los enfermos, lavandería y cocina a la vez que su formación espiritual bajo la doctrina de San Vicente de Paul representaban los modelos de sencillez y claridad que describen en el hospital los cimientos sobre la ética en enfermería. Estas Hermanas de la Caridad fueron las precursoras del cuidado como Ayudantes de Enfermería en el Hospital San Juan de Dios, sin embargo al iniciar su andadura el Hospital Universitario del Valle, ellas ingresaron como líderes en los servicios de lavandería, cocina y servicios generales, siendo Sor Magdalena García, Sor Mery Valencia y Sor Leonor García las primeras religiosas que dirigían estas actividades; las Hermanas de la Caridad o Vicentinas recibían una preparación religiosa y básica sobre primeros auxilios de cinco anos y renovaban cada año votos de obediencia a la comunidad o la libertad de abandonar el convento para casarse o cambiar de labor, algunas de ellas se formaron por el departamento de enfermería como ayudantes y posteriormente como auxiliares de enfermería o enfermeras.
Estas ideas a partir de la religión se implementaron como modelos a través de la visualización simbólica y física que se utilizaron para facilitar el razonamiento basado en los conceptos y las relaciones entre ellos, se diseñaba el ejercicio de la profesión de Enfermería en el modelo de Florence Nightingale, precursora de la profesión de enfermería, quien generó avances en contra de los prejuicios de su época y contra su destino de mujer que debía permanecer en el hogar y a cambio, escogió la profesión de Enfermera que hasta ese momento estaba desprestigiada y se reservaba a mujeres de mala vida, alcohólicas y de baja posición. Su modelo considera a la enfermería como una vocación religiosa, sólo para mujeres y con énfasis en educación, la experiencia y la observación, en donde la práctica de enfermería implicaba el uso adecuado del aire fresco, la luz, el calor, la limpieza, la tranquilidad y la oportuna selección y administración de dietas, con el menor gasto posible de la energía vital del paciente para evitar la enfermedad. Este modelo conceptual reunió algunos elementos, como el cuidado integral al paciente desde lo espiritual, humano y físico y fue facilitador de las teorías del cuidado que se fueron implementando en el Hospital y muy congruentes con los planteamientos de Kosier, Erb y Olivieri, quienes plantean que una teoría se puede hacer utilizando el marco conceptual de otras disciplinas, utilizando un planteamiento inductivo, esto es, observando los aspectos de la práctica enfermera y utilizando un planteamiento deductivo que busque la compatibilidad o acoplamiento de una teoría general de la enfermería con varios aspectos de ella.
FOTO 004 Alumnas de Enfermería
Este Hospital, iniciaba bajo la perspectiva y adopción del método científico que permitió la elaboración de esquemas de pensamientos sobre el funcionamiento normal y anormal del cuerpo humano que fueron adoptando y transformando en esquemas de pensamientos propios del talento humano institucional. La Enfermería como disciplina representó el cuerpo del conocimiento relacionado con el estudio del cuidado en la salud humana que comprende tanto la ciencia como el arte de enfermería. Dentro de la disciplina, la ciencia de enfermería se dedica a contestar preguntas de interés para la profesión y adicionar al conocimiento del cuidado de enfermería. La práctica de enfermería representa el arte de la disciplina. Esta experiencia del cuidado de enfermería de una forma específica según la cultura, valores, creencias y patrones de conducta, soportan hasta hoy, una base científica y humanística de conocimientos de la disciplina, donde la persona, el ambiente, la salud y la enfermería concluyen en el cuidado humano como parte esencial de enfermería, además de su rasgo distintivo y unificador de profesión para mujeres que cambia cuando ingresaron hacia los años 80 los primeros enfermeros de la Universidad del Valle al hospital: Octavio Nava y Gustavo Echeverry.
La planeación visionaria es sin lugar a dudas el motor del desarrollo de las organizaciones, desde que se graduaron las enfermeras de la Universidad del Valle, e ingresan el mismo día en que el hospital abre sus puertas, se inicia el cuidado humano como ciencia humana en el Hospital Universitario del Valle, con el liderazgo de la enfermera Judith Dueñas, primera jefe del departamento de Enfermería, quien con su arduo trabajo y apoyo constante del director del hospital Dr. Arturo Vélez Gil, se adelantó a los diferentes problemas en el conocimiento y desarrollo que podían interceder el progreso teórico de la profesionalización de la enfermería como una disciplina común de interés que se organiza alrededor de conocimiento acumulado de un grupo académico o profesional.
Antes de abrir las puertas a la comunidad, la enfermera Judith Dueñas lideró el cuidado de enfermería a partir de la organización holística de la profesión y probablemente su paradigma interpretativo le hizo proveer métodos propios de enfermería dado la complejidad del contexto como experiencia humana. Judith Dueñas fue directora de la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle y del Hospital Universitario del Valle, ya que el concepto educación-práctica se convertían en sinónimos al momento de prestar el servicio. Fue la persona que múltiples veces viajó a Buenaventura a recibir los elementos de dotación de las unidades hospitalarias importadas de Europa, ella, con cautela, conocimiento, intuición, organización y tenacidad, hizo que en 1956, cuando abre el hospital, el profesional de enfermería se constituyera en un recurso único y valioso para brindar el cuidado humano a partir de una educación formal y la prestación de un servicio con organización gremial y que su cuerpo de conocimiento y tradición escrita, fortalecieran los cimientos de la profesión de enfermería iniciada en Colombia desde 1903.
Cuando el hospital abre sus primeras 60 camas, el cuidado profesional de enfermería se inicia con las enfermeras: Alida Sánchez Prado, Ana Rosa Herrera Solano, Ana Rivera, Aura Bedoya Bolívar, Bertha Franco Quevedo, Blanca Helena Córdoba Madriñan, Graciela Chávez Bueno, Lilia Díaz Varón, Lilian Holzinger, Fanny Delgado, Vybar Gómez, Ester Restrepo, Nora Ochoa Lujan, Lilian López de Pérez, Beatriz Godoy, Vilma Rizzeto Ramírez, Sor Leonor García, Sor Gilma Gallego y Sor Bertha Valencia, como eran pocas (16 enfermeras jefes y 3 supervisoras) y la necesidad del hospital era mayor, entonces, la vivienda de las enfermeras eran en las mismas instalaciones del hospital y poder de esta manera prestar un cuidado las 24 horas distribuidos en 3 turnos de 7am a 3pm, 3pm a 11pm, y 11pm a 7 am, adicional a tener una disponibilidad permanente. Los esquemas de turno se modifican hacia los años 80 para todo el personal de enfermería y las supervisoras pasan a realizar cobertura solo en el día. A mediados del año 1959, la vivienda de las enfermeras en el hospital se traslada a una casa contigua al hospital hasta el año 1972, tiempo en el cual la enfermera deja de ser una profesional que debía guardar retiro para el cumplimiento de su labor. En el año 1979 las Hermanas Vicentinas y quienes continuaban viviendo en el Hospital, se retiran a vivir a su convento, hoy Iglesia de la Milagrosa, y los espacios del Hospital se acondicionan como aulas de clases y talleres de fisioterapia y ya en el año 2006 se desarrolla el Proyecto de Medicina y Rehabilitación Física.
FOTO 005 Ingreso a la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle, cuartos del internado, sala de recreación y aulas de clase. Celebración Día de la Virgen María por Enfermeras del Hospital. (Parte superior). Prácticas de Enfermería en el Hospital Universitario del Valle. (Parte inferior).
El Cuidado del paciente por el profesional de enfermería en el Hospital en su inicio se dirigió a las cuatro especialidades médicas tradicionales: medicina interna, cirugía (en esta sala se hospitalizaban todos los pacientes quirúrgicos tanto de ortopedia, cirugía general y neurocirugía), obstetricia y consulta externa. En agosto de 1956, cuando se presenta en la antigua sede del Batallón Pichincha (calle 25 con carrera 2da) la explosión de 7 camiones que transportaban dinamita del sur del país a la capital, se presenta la mayor emergencia de la ciudad y por tanto el Hospital ante la magnitud de adultos y niños heridos y quemados, abre su servicio de Urgencias y Pediatría. La enfermera Bertha Franco quien participó en la emergencia, redacta que eran tantos los heridos que se acomodaban los más delicados en cuanto espacio había en el Hospital y los menos delicados eran trasladados a la sede del Club San Fernando, sede social privada que facilitó los espacios para la atención de los pacientes. La solidaridad de médicos, enfermeras de Colombia y otros países fue indescriptible, la ayuda humana, tecnológica y técnica en pro del bienestar de la comunidad promovió el posicionamiento del Hospital a nivel internacional.
Este surgimiento como único centro especializado requirió que la Enfermería desde su inicio en el hospital haya enfrentado grandes retos; uno de ellos constituye el avance y posicionamiento del “Cuidado como objeto de estudio de enfermería”, según define Madeleine Leninger, el “Cuidado son aquellos actos de asistencia, de soporte o facilitadores que van dirigidos a otro ser humano o grupo con necesidades reales o potenciales con el fin de mejorar o aliviar las condiciones de vida humana”. El Concepto de Enfermería articulado a la Teoría de Virginia Henderson, en donde describe a la Enfermera como la persona que tiene la función de ayudar al individuo sano y enfermo, realizando aquellas actividades que contribuyan a su salud, su recuperación o a una muerte tranquila, que éste realizaría sin ayuda si tuviese la fuerza, la voluntad y el conocimiento necesario. Los elementos importantes de la teoría de Henderson como la enfermera que asiste al paciente en sus actividades esenciales, que introduce o desarrolla el criterio de independencia del paciente en la valoración de la salud para identificar las 14 necesidades humanas básicas que componen los Cuidados Enfermeros, han ido fortaleciéndose en el hospital y se asimilan a las necesidades y la Escala de necesidades de Maslow, tan utilizadas hoy en día en múltiples escenario del contexto actual de la vida, especialmente en instituciones de salud como el hospital, hoy moldeada como empresa social del estado.
FOTO 006 Día de Graduación de las Primeras Enfermeras que iniciaron labores en el Hospital Universitario del Valle, ceremonia realizada en el Auditorio Carlos Manzano del Hospital (parte superior). Enfermeras y Religiosas en la terraza y jardines del Hospital. (Parte inferior).
El ir desarrollando el Modelo de Cuidado en el Hospital, requería de un apoyo formal de los recursos humanos, no de ayudantes sino de auxiliares de enfermería. Las primeras ayudantes de enfermería fueron entrenadas en unos cursos cortos por la Universidad del Valle y posteriormente por el Departamento de Enfermería del hospital realizando los estudios complementarios de un año para certificar al personal como auxiliares de enfermería, actividad que también se realizó con las secretarias clínicas y mensajeros hasta 1970 cuando el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) bajo la dirección de la enfermera Beatriz Rollo Fernández, asume la responsabilidad educativa de este talento humano y es así como a finales de 1980 todo el personal auxiliar de enfermería es certificado, entre las primeras graduadas como becarias y hoy jubiladas o próximas a pensionarse se encuentran Rosalía Moreno Galeano, Liliana Quintero García, Mariela Loboa Tejado, Aura Ligia Lozano, Giomar Quiñonez, Fabiola Cárdenas, Fanny Nuñez y Margarita Ruiz (las religiosas al certificarse recibían un salario de $808 mensuales y una bonificación anual de $404, estos dineros iban a la comunidad religiosa). A partir de entonces el Cuidado Humano por profesionales apoyado en personal certificado generó otro cambio positivo en la aplicación de la teoría Transcultural en donde el cuidado se hace de forma responsable, coherente con la cultura y que encajen con las necesidades y valores, creencias y realidades culturales del modo de vida del paciente.
La labor iniciada por la enfermera Judith Dueñas y que prosiguió por las sucesoras jefes de departamento como las Enfermeras Beatriz Rueda y Zulema Plata, quien sus colegas las han definido como unas grandes personas con alto sentido de la responsabilidad y motivación hacia la organización de las tareas de enfermería, con ellas se inicia la recopilación de todas las funciones y procedimientos de enfermería editándose el primer libro del Manual de funciones y Procedimientos de enfermería.
Posteriormente en 1963 la Enfermera Piedad Portilla dirige el Departamento de Enfermería por muy corto tiempo debido al nombramiento como Ministra de Salud y entrega al cargo a Inés Durana Samper enfermera brillante, poseedora de grandes virtudes no solamente profesionales sino fundamentalmente humanas que gestaron su actuar en su vida familiar, de colega y en el campo de la salud de nuestro país. Hacia 1972 la enfermera Bertha Franco asume el liderazgo del departamento hasta 1981, fecha en la cual se termina la relación directa que existía entre el Departamento de Enfermería del Hospital Universitario del Valle y la dirección de la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle. Este valioso e importante grupo de enfermeras nos transfirieron las formas en las cuales el conocimiento y el conocer son desarrollados a partir de encontrarse con la realidad del hospital frente a la realidad del mundo donde se incluía el razonamiento, la observación, prueba de hipótesis, experimentación e intuición, estos fundamentos de la práctica propiciaron el surgimiento de la especializaciones y motivaron el envío a capacitación de enfermeras a la Universidad del Valle, a Estados Unidos y Canadá para fortalecer el cuidado al enfermo y la imagen institucional del “mas grande y moderno Hospital del Suroccidente Colombiano”, es así como en 1974 las primeras especialistas se distribuyen en los nuevos servicios, Nidia Angela Paz, especialista en cuidados intensivos, Shirley Alvarez, especialista en pediatría, Lyda Guerrero y Consuelo Delgado, especialista en gineco-obstetricia, Omaira Rengifo, especialista en sala de operaciones, Aracelly Tenorio, especialista en cuidados neuroquirúrgicos de la sala de Neurocirugía, Sor Gilma Gallego en medicina interna y Ana de Pubiano en Consulta externa; y se inicia en el cargo de asistente de educación Lilia Díaz de Osorio. Los aportes de esta evolución de enfermería contribuyeron a la dotación y uso de tecnología médica, organización de los servicios, formación a gran escala y distribución de personal especializado en los diferentes servicios de manera que se continuarán implementando las primeras teorías del cuidado a partir de la articulación entre teoría y práctica con énfasis en competencia, creatividad e innovación con el sello del crecimiento científico.
FOTO 007 Enfermeras Especialistas del Hospital Universitario del Valle. De izquierda a derecha, Dolly Mondragón, Gloria Nelly León, Carmen del Pilar Thorpt H, y Amanda García Lenis.
La evolución de esta etapa denota cambios en cierta dirección, desenvolviéndose de inferior a superior, de simple a más complejo y dirigida a una mayor coherencia, en donde la evolución denota un sentido de continuidad y da la impresión de cambios acumulativos a larga duración. El enfoque evolucionista de la disciplina científica de Enfermería en el hospital ha combinado momentos de innovación intelectual que se han complementado mediante un proceso continuo de evaluación, critica y selección. Esta posición evolucionista ha reconocido el significado de la genealogía de las ideas en el progreso del conocimiento. Toulmin (1972) utilizó la teoría de la evolución de Darwin como una base sobre la cual formuló la evolución del conocimiento y destaca que cada disciplina contiene su propio cuerpo de conceptos, áreas de interés, metodología y metas, las cuales pueden cambiar drásticamente pero en forma lenta a través de un proceso de mutación, en donde todas las ideas, conceptos y metodología se les da la oportunidad de competir, de discutirse o eliminarse, solo los descubrimientos e innovaciones que se ajustan, florecen y sobreviven de una generación a otra.
El enfoque evolucionista influyente en Enfermería del hospital, articulado a los patrones fundamentales del conocimiento establecidos por Carper evidencia el amplio radio del saber a partir de cuatro patrones: Empírico, Conocimiento Personal, Estético y Ético. El patrón Empírico expresado en múltiples hechos, descripciones de eventos u objetos que a partir de las hipótesis derivadas de la observación y la formación inicial que tenían las primeras enfermeras forjadoras de la historia del hospital; el patrón del Conocimiento Personal, donde la clara visión, seguridad y posicionamiento que querían se unificaba al conocimiento de sí mismo para lograr que la relación con los otros se fortaleciera en el actuar, interrelacionar, discutir, intervención, respeto y responsabilidad profesional por el bienestar del otro; Patrón Estético, su arte aprendido y aplicado en el conocimiento práctico que tenían ante una situación o cuidado particular, finalmente, el patrón más relevante a nuestro parecer, el Patrón Ético, relevante en las múltiples acciones que involucran descripciones de obligaciones morales, fines deseados, valores morales y no morales. Este conocimiento que constituye la ética de enfermería es generado por investigaciones éticas centradas en la identificación y análisis de las creencias y valores albergados por los individuos.
FOTO 008 Hospital Universitario del Valle
La Enfermería en el Hospital ha interactuado con comportamientos humanos en todos sus aspectos, probablemente ha sido el motivo que le ha permitido explicarse a sí mismo a partir de las teorías pluralistas actuando en un sistema abierto, que se influencia y responde a la sociedad todo el tiempo al igual que los patrones del conocimiento se interrelacionan y surgen de la totalidad de la experiencia. Han incidido de manera importante el Modelo de Adaptación de Calixta Roy, El Modelo de los Sistemas de Betty Newman, El Marco Sistémico y Teoría de la Consecución de Objetivos de Imogene King, la Teoría del Proceso de Enfermería de Ida Jean Orlando y la Teoría de Filosofía y ciencia del cuidado de Jean Watson.
Estos enfoques que surgen en el hospital hacia mediados del año 1980 y se intensifican a partir de 1990, se integran por la jefe del Departamento de enfermería María Elena Quevedo, enfermera y abogada que inicia cuando la Enfermería interrelaciona su hacer, su conocimiento y práctica con otras disciplinas diferentes a la salud. El hospital en este periodo se caracteriza por el fomento de la máxima utilización de los recursos tecnológicos y de infraestructura, para orientar sus servicios a los grupos más vulnerables, y en el país se inician los procesos de descentralización de la política en salud (ley 10 de 1990). La salud se fortalece como un servicio público que incluye la prevención, curación y rehabilitación, y es un resultante de orden intersectorial que descentraliza decisiones y recursos financieros. El hospital entonces cambia su denominación de hospital público a Empresa Social del Estado y se introduce la gerencia como elemento regulador de los procesos planificadores y de administración de recursos. El hospital incursiona en Programas nuevos como Trasplantes de Órganos y Tejidos, Terapia Enterostomal y Soporte Nutricional, Programa de la Madre Acompañante, Programa Todo Corazón, Programa de Atención en Casa a Pacientes de Ortopedia (que en julio de 2005 diversifica su atención a pacientes de todas las especialidades médicas). Se remodela y adecuan nuevas áreas físicas, se adquiere y adecua según la necesidad del paciente nueva tecnología sumada a la formación de enfermeras en las nuevas especialidades ofertadas por la Universidad del Valle como Neonatología (Betzaida García, Maria Eugenia Acevedo, Diana España). Salud Familiar (Manuela Mera, Carmen del Pilar Thorpt) y Nefrología (Esperanza Londoño, Claudia Valdez), se posiciona el cuidado de enfermería en la Unidad de Cuidados Intensivos del Recién Nacido, Unidad de Diálisis y Trasplantes, Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos y Adultos, siendo modelos a tomar por clínicas que surgían en la ciudad. Este periodo de gran producción y organización logística de la especialidad clínica articulada a la administración, conducen a la cultura del desarrollo del Hospital como organización socialmente responsable, con misión y valores éticos, de planeación y evaluación estratégica, productividad y desarrollo sostenible que llevan a procesos de reestructuración del recurso humano del hospital y el 23 de marzo de 2000 originan el cierre del Departamento de Enfermería bajo la dirección de la enfermera Elsa Escobar, excelente líder profesional y humana, quien pese a todas sus acciones de continuidad no logró la continuidad del proceso del cuidado dirigido por el departamento de enfermería. Como diría Bergson: “piensan como hombres de acción y actúan como hombres de pensamiento”. Solo que su pensamiento y su acción se distinguen porque el líder sabe muy bien y lo inculca en sus colaboradores que están allí para amar, servir, comprender, promover, crear, mejorar, liberar y desarrollar al hombre y a la sociedad De manera alterna se inicia para Enfermería otro reto o transformación, especialmente para el equipo de coordinadoras de enfermería: la formación en Administración y Gerencia en servicios de salud, que le permitan a enfermería programar el cuidado de la persona enferma a partir de procesos y procedimientos que respondan a la calidad, eficiencia y eficacia en el servicio, en donde la práctica previamente concebida como espacio para la demostración de habilidades se fortaleciera adicionando espacios diseñados para recrear y confrontar marcos teóricos con miras a su validación o reconstrucción. En este nuevo enfoque de administración sistemática, Enfermería continúa su ruta en pro del cuidado al enfermo y es así como se crean cargos de subdirectores de unidades de servicios liderados por enfermeras, inicialmente Maria Victoria Sandoval, posteriormente Carmen del Pilar Thorpt y Amanda García Lenis, personas innovadoras, responsables y con alto sentido táctico para asumir sus nuevas experiencias.
FOTO 009 Primer Encuentro de Enfermeras Fundadoras del Hospital Universitario del Valle con el Grupo de Enfermeras Coordinadoras, evento realizado por la Enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado en el Hospital en Octubre 20 de 2006
Durante estos 56 años del Hospital, el progreso de enfermería ha sido único y aceleradamente fenomenal, que ha vivido diversos enfoques como organización y ha aceptado las diferencias si se compara con otras ciencias como también la adaptación de la singularidad de enfermería y las capacidades de sus eruditos para desarrollar conocimiento. El o la Enfermera/o en el Hospital ha cotejado según el momento con diversas percepciones, experiencias, múltiples realidades, apariencias y fenómenos que en este centro de vida ha permitido a enfermería trazar su propia ruta a partir de premisas de conceptos viejos y conceptos nuevos.
La tendencia actual del Sistema General de Seguridad en Salud, ha generado un pensamiento crítico y analítico contextualizado con la realidad del país, el equipo de enfermería del hospital debe liderar procesos de cambio partiendo de lo histórico a lo moderno y es probable que la realidad esperada de prestar el servicio del cuidado de enfermería a la comunidad, realmente responda al perfil epidemiológico de ella como seres humanos que se unen al esquema metodológico de participación-acción y donde exista el espacio para las experiencias, reflexiones y criticas que no desvirtúen que el acto del “Cuidado de Enfermería” es el ser y esencia del ejercicio de la profesión, la cual siempre debe mantener sus principios de universalidad, individualidad, humildad, ritmos alternantes, paciencia, compromiso, creatividad y presencia auténtica en todos los escenarios en que actúe y se exprese con patrones del conocimiento científico, ético, personal y estético moldeables constantemente en la práctica de la asistencia, docencia e investigación.
FOTO 010 Tarta del 50 cumpleaños
El Hospital del siglo XXI que hoy cuenta con 725 camas, lo dirige la Enfermera Maria Lucero Urriago y lo consolidan como el más grande del país en el sector público, articulado al desarrollo de Enfermería a partir de modelos conceptuales y/o teorías de enfermería en la atención, además ha permitido que los profesionales compartan el lenguaje en la orientación y aplicación de los cuidados con calidad, autonomía y visibles por sí mismo en la coherencia y cohesión del conocimiento con la práctica disciplinar desde la docencia, la asistencia y la investigación, como hilo conductor que ha generado y contribuido con la identidad de la profesión en el hospital, ha permitido y fortalecido el colegaje inter y extra institucional, con liderazgo y valores éticos que garantizan la aplicación de un cuidado humanizado, integral, continuo y de calidad centrado en las necesidades de la persona enferma, familia o colectivo. Las Enfermeras del ayer fueron precursores del Modelo de Atención y la Disciplina de Enfermería. Hoy en el Hospital Universitario del Valle, las Enfermeras son utilizadas como fuente y recurso del conocimiento de enfermería; deben continuar, transformar, moldear y proponer no “sólo el cuidado de los pacientes, sino también sobre las políticas que orientan al cuidado de la salud.
Es el desarrollo de la investigación, la docencia, la teoría y el conocimiento basado en la práctica lo que impactará en el cuidado de los pacientes, es la conexión entre estas áreas lo que fortalece y posiciona un cuidado humano con calidad y seguridad que vaya más allá y trascienda en el cambio de políticas del cuidado, bien expresados por Elizabeth Murrain Kudson, en sus escritos sobre trascender en el cuidado de enfermería. Hoy la Enfermería, en el hospital tiene toda la experiencia y conocimiento para proponer, definir e implementar un modelo único de cuidado humano que lo identifique en su forma de actuar, lo posicione en el campo de la ciencia y lo articule a los convenios de docencia y servicios existentes.
FOTO 011 Enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
AGRADECIMIENTOS
Con sentimientos de admiración y aprecio a todas y cada una de las primeras enfermeras del Hospital Universitario del Valle: Bertha Franco, Lilia Díaz de Osorio, Alida Sanchez Prado, Ana Rosa Herrera, Ana Rivera, Aura Bedoya, Blanca Elena Córdoba, Graciela Chavez, Lilia Díaz, Lilian Holzinger, Fanny Delgado, Iobar Gómez, Esther Restrepo, Sor Leonor García, Sor Gilma Gallego y Sor Bertha Valencia, enfermeras docentes de Enfermería de la Universidad del Valle y Universidad Santiago de Cali, colegas y amigas del Hospital Universitario del Valle, a todos por su valioso aporte en datos biográficos y entrevistas concedidas.
AGRADECIMIENTO ESPECIAL
Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
FOTO 012 El Hospital Universitario del Valle "Evaristo García". E.S.E se encuentra ubicado en la ciudad de Cali, departamento del Valle del Cauca en Colombia.
Manuel Solórzano Sánchez
Enfermero Hospital Donostia. Osakidetza /SVS
Vocal del País Vasco de la SEEOF
Miembro de Eusko Ikaskuntza
Miembro de la Sociedad Vasca de Cuidados Paliativos
Miembro Comité de Redacción de la Revista Ética de los Cuidados
M. Red Iberoamericana de Historia de la Enfermería
masolorzano@telefonica.net
Autora de este trabajo es la enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
A inicios de los años 80, se me da la gran oportunidad de iniciar mis estudios de Enfermería en la Universidad del Valle, aula máxima que me inspiraba y motivaba a ser partícipe de su experiencia pedagógica. Aún en pleno desarrollo de mi adolescencia inicie mis estudios y mi meta fue siempre ser una Excelente Enfermera, en todos los aspectos de la integralidad del ser humano, que con mucho amor y serenidad me habían trasmitido mis padres.
FOTO 001 Enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
Terminé mis estudios de pregrado, con desempeños muy buenos. Inicie la etapa de año rural, lejos de casa, enfrentándome a situaciones de violencia en el Municipio de Trujillo que muy hábilmente fui enfrentando y fui valorando para mi desempeño profesional. En el año 1988 inicie mi desempeño como profesional en el Hospital Universitario del Valle, “Evaristo García”, E.S.E, entidad hospitalaria que ha permitido vivir mi crecimiento personal y profesional por el bienestar propio y de todos aquellos que han sido mis pacientes, compañeros, usuarios, jefes, amigos, docentes, etc.
FOTO 002 Diferentes fotos del Hospital Universitario del Valle
Mi meta hacia la excelencia en Enfermería se inicia con la realización de los estudios de actualización y postgrados, realizando especializaciones, diplomados, seminarios, congresos, pasantías, ponencias, a nivel nacional e internacional. He sido una esmerada y apasionada estudiante de post grados de la Universidad del Valle, Universidad Libre, Universidad Santiago de Cali, Universidad de Antioquia, Universidad Javeriana, cada una de ellas fueron aportando y ampliando mi campo cognitivo en el cuidado integral del ser humano, desde la perspectiva física, humana, emocional y social del individuo. Estos encuentros con el conocimiento fueron perfilando mi actuar hacia la Gerencia del Cuidado y la Donación y el Trasplante de Órganos, Tejidos y Células. Campo ampliamente estudiado que me ha permitido compartir escenarios y experiencias como el realizar mis estudios en Estados Unidos, España (en 2 ocasiones), Argentina, Panamá, París y Londres donde pude cumplir mi gran anhelo de visitar el “museo de Florence Nightingale”.
Hoy, después de 24 años de egresada de la Universidad del Valle y de 22 años de trabajo en el HUV. Con eterno agradecimiento a Dios, mi madre, esposo e hijo, por permitirme ser la persona y enfermera que he querido ser.
TRABAJO. HISTORIA DE ENFERMERÍA DEL HOSPITAL
Desde la antigüedad los conceptos del cuidado de los enfermos, ancianos, personas desvalidas o débiles y minusválidas junto con la promoción de la salud han sido los pilares del concepto de enfermería. Enfermería ha sido denominada la mas "antigua de las artes y la mas joven de las profesiones, su historia ha sido modelada por los conceptos del cuidado de las personas evidenciados en cada momento en que ha tenido que actuar para sostenerse como parte vital de la sociedad", no obstante su desempeño y formación académica se ve afectado por cada momento histórico en particular: la estructura económico-político, las organizaciones de poder, los conflictos nacionales e internacionales, los papeles del género femenino y de clase social, los avances científicos, tecnológicos y técnicos, el sistema educativo y de salud, las diferentes categorías socio-profesionales y las propias metas de desarrollo de la profesión han sido determinantes en la evolución que hasta el momento actual han logrado nuestra profesión.
En el año 1938 se crea la ordenanza de construcción del Hospital Universitario del Valle y en 1948 se reconoce la personería Jurídica al Hospital Universitario del Valle por el Ministerio de Justicia y en enero de 1956 se abre el más grande centro de salud para la comunidad vallecaucana y centro de práctica de estudiantes de medicina y de enfermería de la Universidad del Valle. Esta nueva concepción de organización como centro docente asistencial de la salud, hace de la formación de Medicina y Enfermería disciplinas entrelazadas por su complementariedad y ciencias.
En 1903 se inician las primeras Escuelas de Enfermería en Colombia, en 1945 inicia su andadura la Escuela de enfermería de la Universidad del Valle. En 1952 con el empuje y visión de directivas del Valle como el Dr. Gabriel Velásquez Palau y la enfermera Judith Dueñas (egresada de la Universidad Nacional de Colombia), se inicia la formación del segundo grupo de enfermeras profesionales en un edificio de albergue del Club de Leones que lo tenían destinado para niños huérfanos, este edifico tenía grandes pasillos, ambiente rodeado de naturaleza y aire fresco por cercanías a la cordillera de la ciudad (hoy Parque Nacional Natural Farallones de Cali), en el primer piso tenía las aulas de clase y un salón de práctica para procedimientos de enfermería básica, en el segundo piso las habitaciones de las estudiantes y de las profesoras, que hicieron del estudio, la disciplina, respeto y vida espiritual los valores que fundamentaron la convivencia y formación. Este edificio fue donado a la Universidad del Valle con el objetivo de “preparar a las mujeres jóvenes entre 18 y 30 años para prestar ayuda a la familia y a la sociedad en prevención y curación de la enfermedad”, este inmueble hasta la fecha se conserva como Facultad de Odontología de la Universidad del Valle.
En el paradigma empiricista, el conocimiento de enfermería se desarrolla a partir de la observación del mundo natural para verificar y justificar teorías que describen, predicen y prescriben. Fue difícil para el grupo de enfermeras formadas de la época ir a la universidad, cuando la mujer estaba relegada a ir al colegio y prepararse para las labores de hogar, sin embargo, la motivación del conocimiento de la ciencia les hizo disfrutar del internado de la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle por tres años, tiempo en el cual sólo visitaban a sus padres el fin de semana, que a pesar de los momentos de la sociedad caleña, pagaban con orgullo los $30 mensuales a la universidad.
El plan de estudios comprendía una fase preliminar de 4 semanas, donde se buscaba en la estudiante las aptitudes y capacidades para desarrollar su vida profesional. En el primer año las materias eran anatomía y fisiología, parasitología y bacteriología, ética y orientación profesional, nutrición y salud, materia médica, drogas y soluciones, psicología, sociología, legislación sanitaria, primeros auxilios, masajes y vendajes, bioquímica. En el segundo año, cirugía general, medicina general, obstetricia, psiquiatría, ginecología, dietética, ortopedia, endocrinología, artes de enfermería relacionada a cada materia y finalmente en el tercer año anestesia, neurología, dermatología, salud pública, administración de salas y prácticas hospitalarias en cada uno de los servicios.
FOTO 003 Escuela Universitaria de Enfermería del Valle
Desde la formación como estudiantes de enfermería, las futuras Enfermeras que se iniciarían en el hospital, trascendieron de modelos no autónomos a un “modelo conceptual que se aplicará en un currículo con los lineamientos generales de los contenidos y de las estrategias enseñanza-aprendizaje que debían emplearse, y otorgar una visión particular a la educación en Enfermería”. Jackeline Fawcett sostiene que la estructura curricular y los procesos educativos se especifican en 5 reglas que son inherentes a cada modelo conceptual, la primera identifica el enfoque distintivo del currículo y los propósitos que deben abarcarse con la educación de enfermería, el segundo identifica la naturaleza general y la secuencia del contenido que será presentado, la tercera identifica los escenarios en los cuales ocurrirá el proceso educativo, la cuarta regla identifica las características de los estudiantes y la quinta las estrategias de enseñanza aprendizaje que se utilizarán. Los fundamentos teóricos del currículo contemplaron las teorías de las ciencias básicas, de las ciencias humanas y de la educación, así mismo establecieron indicadores empíricos, experiencias clínicas y tareas adecuadas que les permitieron alcanzar los fines propuestos en el proyecto educativo del programa de enfermería implementado por la Universidad del Valle y factor determinante para iniciar la puesta en marcha de modelos y teorías en el cuidado de los pacientes en el Hospital Universitario del Valle. “Evaristo García”. Empresa Social del Estado.
Una anécdota de la época descrita por la enfermera Bertha Franco señala que el primer día de prácticas al ingresar el grupo de estudiantes por la puerta principal del Hospital San Juan de Dios, sitio de prácticas mientras se construía el Hospital Universitario del Valle. Todos los pacientes tanto hombres como mujeres habían formado una fila larga, donde manifestaban la oposición al ingreso de mujeres enfermeras, ellos querían la atención por las monjas o “hermanitas”, así ellas no fueran formadas en la universidad.
El modelo de Ernestine Wiedenbach, facilitó el articular los conceptos teóricos de éstas enfermeras a la práctica del cuidado del paciente en el hospital y la enfermera se fue perfilando como la persona funcional que actúa, piensa y siente para otra persona que necesita ayuda y para lo cual se requería de un “conocimiento sólido de los estados normales y patológicos del paciente, una completa comprensión de la psicología humana, tener competencias en habilidades clínicas y la capacidad de iniciar y mantener una comunicación terapéutica con el paciente y su familia a la vez que desarrollaba un juicio clínico coherente para tomar las decisiones sobre el cuidado del paciente y para interpretar la conducta del paciente”. Se inició entonces la ciencia del cuidado de enfermería y se deja de un lado pero sin restar importancia, la influencia de las Órdenes religiosas de enfermería.
En el Hospital Universitario del Valle, las Órdenes religiosas de Hermanas de la Caridad fundadas por San Vicente de Paul en momentos en que la miseria y la enfermedad causadas por las guerras estaban aniquilando a Francia (finales de la edad media), fueron motivaciones para cuidar a los enfermos en el ámbito de la religión y no en el de la ciencia o en el de la técnica; quedando por tanto el cuidado como acto de solidaridad humana, vinculado históricamente a la religiosidad y a la abnegación, sin embargo, estas tendencias religiosas influyeron en el hospital en crear modelos de enfermería domiciliaria, ya que muchas personas de la comunidad acudían voluntariamente a colaborar con las actividades de los cuidados a los enfermos, lavandería y cocina a la vez que su formación espiritual bajo la doctrina de San Vicente de Paul representaban los modelos de sencillez y claridad que describen en el hospital los cimientos sobre la ética en enfermería. Estas Hermanas de la Caridad fueron las precursoras del cuidado como Ayudantes de Enfermería en el Hospital San Juan de Dios, sin embargo al iniciar su andadura el Hospital Universitario del Valle, ellas ingresaron como líderes en los servicios de lavandería, cocina y servicios generales, siendo Sor Magdalena García, Sor Mery Valencia y Sor Leonor García las primeras religiosas que dirigían estas actividades; las Hermanas de la Caridad o Vicentinas recibían una preparación religiosa y básica sobre primeros auxilios de cinco anos y renovaban cada año votos de obediencia a la comunidad o la libertad de abandonar el convento para casarse o cambiar de labor, algunas de ellas se formaron por el departamento de enfermería como ayudantes y posteriormente como auxiliares de enfermería o enfermeras.
Estas ideas a partir de la religión se implementaron como modelos a través de la visualización simbólica y física que se utilizaron para facilitar el razonamiento basado en los conceptos y las relaciones entre ellos, se diseñaba el ejercicio de la profesión de Enfermería en el modelo de Florence Nightingale, precursora de la profesión de enfermería, quien generó avances en contra de los prejuicios de su época y contra su destino de mujer que debía permanecer en el hogar y a cambio, escogió la profesión de Enfermera que hasta ese momento estaba desprestigiada y se reservaba a mujeres de mala vida, alcohólicas y de baja posición. Su modelo considera a la enfermería como una vocación religiosa, sólo para mujeres y con énfasis en educación, la experiencia y la observación, en donde la práctica de enfermería implicaba el uso adecuado del aire fresco, la luz, el calor, la limpieza, la tranquilidad y la oportuna selección y administración de dietas, con el menor gasto posible de la energía vital del paciente para evitar la enfermedad. Este modelo conceptual reunió algunos elementos, como el cuidado integral al paciente desde lo espiritual, humano y físico y fue facilitador de las teorías del cuidado que se fueron implementando en el Hospital y muy congruentes con los planteamientos de Kosier, Erb y Olivieri, quienes plantean que una teoría se puede hacer utilizando el marco conceptual de otras disciplinas, utilizando un planteamiento inductivo, esto es, observando los aspectos de la práctica enfermera y utilizando un planteamiento deductivo que busque la compatibilidad o acoplamiento de una teoría general de la enfermería con varios aspectos de ella.
FOTO 004 Alumnas de Enfermería
Este Hospital, iniciaba bajo la perspectiva y adopción del método científico que permitió la elaboración de esquemas de pensamientos sobre el funcionamiento normal y anormal del cuerpo humano que fueron adoptando y transformando en esquemas de pensamientos propios del talento humano institucional. La Enfermería como disciplina representó el cuerpo del conocimiento relacionado con el estudio del cuidado en la salud humana que comprende tanto la ciencia como el arte de enfermería. Dentro de la disciplina, la ciencia de enfermería se dedica a contestar preguntas de interés para la profesión y adicionar al conocimiento del cuidado de enfermería. La práctica de enfermería representa el arte de la disciplina. Esta experiencia del cuidado de enfermería de una forma específica según la cultura, valores, creencias y patrones de conducta, soportan hasta hoy, una base científica y humanística de conocimientos de la disciplina, donde la persona, el ambiente, la salud y la enfermería concluyen en el cuidado humano como parte esencial de enfermería, además de su rasgo distintivo y unificador de profesión para mujeres que cambia cuando ingresaron hacia los años 80 los primeros enfermeros de la Universidad del Valle al hospital: Octavio Nava y Gustavo Echeverry.
La planeación visionaria es sin lugar a dudas el motor del desarrollo de las organizaciones, desde que se graduaron las enfermeras de la Universidad del Valle, e ingresan el mismo día en que el hospital abre sus puertas, se inicia el cuidado humano como ciencia humana en el Hospital Universitario del Valle, con el liderazgo de la enfermera Judith Dueñas, primera jefe del departamento de Enfermería, quien con su arduo trabajo y apoyo constante del director del hospital Dr. Arturo Vélez Gil, se adelantó a los diferentes problemas en el conocimiento y desarrollo que podían interceder el progreso teórico de la profesionalización de la enfermería como una disciplina común de interés que se organiza alrededor de conocimiento acumulado de un grupo académico o profesional.
Antes de abrir las puertas a la comunidad, la enfermera Judith Dueñas lideró el cuidado de enfermería a partir de la organización holística de la profesión y probablemente su paradigma interpretativo le hizo proveer métodos propios de enfermería dado la complejidad del contexto como experiencia humana. Judith Dueñas fue directora de la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle y del Hospital Universitario del Valle, ya que el concepto educación-práctica se convertían en sinónimos al momento de prestar el servicio. Fue la persona que múltiples veces viajó a Buenaventura a recibir los elementos de dotación de las unidades hospitalarias importadas de Europa, ella, con cautela, conocimiento, intuición, organización y tenacidad, hizo que en 1956, cuando abre el hospital, el profesional de enfermería se constituyera en un recurso único y valioso para brindar el cuidado humano a partir de una educación formal y la prestación de un servicio con organización gremial y que su cuerpo de conocimiento y tradición escrita, fortalecieran los cimientos de la profesión de enfermería iniciada en Colombia desde 1903.
Cuando el hospital abre sus primeras 60 camas, el cuidado profesional de enfermería se inicia con las enfermeras: Alida Sánchez Prado, Ana Rosa Herrera Solano, Ana Rivera, Aura Bedoya Bolívar, Bertha Franco Quevedo, Blanca Helena Córdoba Madriñan, Graciela Chávez Bueno, Lilia Díaz Varón, Lilian Holzinger, Fanny Delgado, Vybar Gómez, Ester Restrepo, Nora Ochoa Lujan, Lilian López de Pérez, Beatriz Godoy, Vilma Rizzeto Ramírez, Sor Leonor García, Sor Gilma Gallego y Sor Bertha Valencia, como eran pocas (16 enfermeras jefes y 3 supervisoras) y la necesidad del hospital era mayor, entonces, la vivienda de las enfermeras eran en las mismas instalaciones del hospital y poder de esta manera prestar un cuidado las 24 horas distribuidos en 3 turnos de 7am a 3pm, 3pm a 11pm, y 11pm a 7 am, adicional a tener una disponibilidad permanente. Los esquemas de turno se modifican hacia los años 80 para todo el personal de enfermería y las supervisoras pasan a realizar cobertura solo en el día. A mediados del año 1959, la vivienda de las enfermeras en el hospital se traslada a una casa contigua al hospital hasta el año 1972, tiempo en el cual la enfermera deja de ser una profesional que debía guardar retiro para el cumplimiento de su labor. En el año 1979 las Hermanas Vicentinas y quienes continuaban viviendo en el Hospital, se retiran a vivir a su convento, hoy Iglesia de la Milagrosa, y los espacios del Hospital se acondicionan como aulas de clases y talleres de fisioterapia y ya en el año 2006 se desarrolla el Proyecto de Medicina y Rehabilitación Física.
FOTO 005 Ingreso a la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle, cuartos del internado, sala de recreación y aulas de clase. Celebración Día de la Virgen María por Enfermeras del Hospital. (Parte superior). Prácticas de Enfermería en el Hospital Universitario del Valle. (Parte inferior).
El Cuidado del paciente por el profesional de enfermería en el Hospital en su inicio se dirigió a las cuatro especialidades médicas tradicionales: medicina interna, cirugía (en esta sala se hospitalizaban todos los pacientes quirúrgicos tanto de ortopedia, cirugía general y neurocirugía), obstetricia y consulta externa. En agosto de 1956, cuando se presenta en la antigua sede del Batallón Pichincha (calle 25 con carrera 2da) la explosión de 7 camiones que transportaban dinamita del sur del país a la capital, se presenta la mayor emergencia de la ciudad y por tanto el Hospital ante la magnitud de adultos y niños heridos y quemados, abre su servicio de Urgencias y Pediatría. La enfermera Bertha Franco quien participó en la emergencia, redacta que eran tantos los heridos que se acomodaban los más delicados en cuanto espacio había en el Hospital y los menos delicados eran trasladados a la sede del Club San Fernando, sede social privada que facilitó los espacios para la atención de los pacientes. La solidaridad de médicos, enfermeras de Colombia y otros países fue indescriptible, la ayuda humana, tecnológica y técnica en pro del bienestar de la comunidad promovió el posicionamiento del Hospital a nivel internacional.
Este surgimiento como único centro especializado requirió que la Enfermería desde su inicio en el hospital haya enfrentado grandes retos; uno de ellos constituye el avance y posicionamiento del “Cuidado como objeto de estudio de enfermería”, según define Madeleine Leninger, el “Cuidado son aquellos actos de asistencia, de soporte o facilitadores que van dirigidos a otro ser humano o grupo con necesidades reales o potenciales con el fin de mejorar o aliviar las condiciones de vida humana”. El Concepto de Enfermería articulado a la Teoría de Virginia Henderson, en donde describe a la Enfermera como la persona que tiene la función de ayudar al individuo sano y enfermo, realizando aquellas actividades que contribuyan a su salud, su recuperación o a una muerte tranquila, que éste realizaría sin ayuda si tuviese la fuerza, la voluntad y el conocimiento necesario. Los elementos importantes de la teoría de Henderson como la enfermera que asiste al paciente en sus actividades esenciales, que introduce o desarrolla el criterio de independencia del paciente en la valoración de la salud para identificar las 14 necesidades humanas básicas que componen los Cuidados Enfermeros, han ido fortaleciéndose en el hospital y se asimilan a las necesidades y la Escala de necesidades de Maslow, tan utilizadas hoy en día en múltiples escenario del contexto actual de la vida, especialmente en instituciones de salud como el hospital, hoy moldeada como empresa social del estado.
FOTO 006 Día de Graduación de las Primeras Enfermeras que iniciaron labores en el Hospital Universitario del Valle, ceremonia realizada en el Auditorio Carlos Manzano del Hospital (parte superior). Enfermeras y Religiosas en la terraza y jardines del Hospital. (Parte inferior).
El ir desarrollando el Modelo de Cuidado en el Hospital, requería de un apoyo formal de los recursos humanos, no de ayudantes sino de auxiliares de enfermería. Las primeras ayudantes de enfermería fueron entrenadas en unos cursos cortos por la Universidad del Valle y posteriormente por el Departamento de Enfermería del hospital realizando los estudios complementarios de un año para certificar al personal como auxiliares de enfermería, actividad que también se realizó con las secretarias clínicas y mensajeros hasta 1970 cuando el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) bajo la dirección de la enfermera Beatriz Rollo Fernández, asume la responsabilidad educativa de este talento humano y es así como a finales de 1980 todo el personal auxiliar de enfermería es certificado, entre las primeras graduadas como becarias y hoy jubiladas o próximas a pensionarse se encuentran Rosalía Moreno Galeano, Liliana Quintero García, Mariela Loboa Tejado, Aura Ligia Lozano, Giomar Quiñonez, Fabiola Cárdenas, Fanny Nuñez y Margarita Ruiz (las religiosas al certificarse recibían un salario de $808 mensuales y una bonificación anual de $404, estos dineros iban a la comunidad religiosa). A partir de entonces el Cuidado Humano por profesionales apoyado en personal certificado generó otro cambio positivo en la aplicación de la teoría Transcultural en donde el cuidado se hace de forma responsable, coherente con la cultura y que encajen con las necesidades y valores, creencias y realidades culturales del modo de vida del paciente.
La labor iniciada por la enfermera Judith Dueñas y que prosiguió por las sucesoras jefes de departamento como las Enfermeras Beatriz Rueda y Zulema Plata, quien sus colegas las han definido como unas grandes personas con alto sentido de la responsabilidad y motivación hacia la organización de las tareas de enfermería, con ellas se inicia la recopilación de todas las funciones y procedimientos de enfermería editándose el primer libro del Manual de funciones y Procedimientos de enfermería.
Posteriormente en 1963 la Enfermera Piedad Portilla dirige el Departamento de Enfermería por muy corto tiempo debido al nombramiento como Ministra de Salud y entrega al cargo a Inés Durana Samper enfermera brillante, poseedora de grandes virtudes no solamente profesionales sino fundamentalmente humanas que gestaron su actuar en su vida familiar, de colega y en el campo de la salud de nuestro país. Hacia 1972 la enfermera Bertha Franco asume el liderazgo del departamento hasta 1981, fecha en la cual se termina la relación directa que existía entre el Departamento de Enfermería del Hospital Universitario del Valle y la dirección de la Escuela de Enfermería de la Universidad del Valle. Este valioso e importante grupo de enfermeras nos transfirieron las formas en las cuales el conocimiento y el conocer son desarrollados a partir de encontrarse con la realidad del hospital frente a la realidad del mundo donde se incluía el razonamiento, la observación, prueba de hipótesis, experimentación e intuición, estos fundamentos de la práctica propiciaron el surgimiento de la especializaciones y motivaron el envío a capacitación de enfermeras a la Universidad del Valle, a Estados Unidos y Canadá para fortalecer el cuidado al enfermo y la imagen institucional del “mas grande y moderno Hospital del Suroccidente Colombiano”, es así como en 1974 las primeras especialistas se distribuyen en los nuevos servicios, Nidia Angela Paz, especialista en cuidados intensivos, Shirley Alvarez, especialista en pediatría, Lyda Guerrero y Consuelo Delgado, especialista en gineco-obstetricia, Omaira Rengifo, especialista en sala de operaciones, Aracelly Tenorio, especialista en cuidados neuroquirúrgicos de la sala de Neurocirugía, Sor Gilma Gallego en medicina interna y Ana de Pubiano en Consulta externa; y se inicia en el cargo de asistente de educación Lilia Díaz de Osorio. Los aportes de esta evolución de enfermería contribuyeron a la dotación y uso de tecnología médica, organización de los servicios, formación a gran escala y distribución de personal especializado en los diferentes servicios de manera que se continuarán implementando las primeras teorías del cuidado a partir de la articulación entre teoría y práctica con énfasis en competencia, creatividad e innovación con el sello del crecimiento científico.
FOTO 007 Enfermeras Especialistas del Hospital Universitario del Valle. De izquierda a derecha, Dolly Mondragón, Gloria Nelly León, Carmen del Pilar Thorpt H, y Amanda García Lenis.
La evolución de esta etapa denota cambios en cierta dirección, desenvolviéndose de inferior a superior, de simple a más complejo y dirigida a una mayor coherencia, en donde la evolución denota un sentido de continuidad y da la impresión de cambios acumulativos a larga duración. El enfoque evolucionista de la disciplina científica de Enfermería en el hospital ha combinado momentos de innovación intelectual que se han complementado mediante un proceso continuo de evaluación, critica y selección. Esta posición evolucionista ha reconocido el significado de la genealogía de las ideas en el progreso del conocimiento. Toulmin (1972) utilizó la teoría de la evolución de Darwin como una base sobre la cual formuló la evolución del conocimiento y destaca que cada disciplina contiene su propio cuerpo de conceptos, áreas de interés, metodología y metas, las cuales pueden cambiar drásticamente pero en forma lenta a través de un proceso de mutación, en donde todas las ideas, conceptos y metodología se les da la oportunidad de competir, de discutirse o eliminarse, solo los descubrimientos e innovaciones que se ajustan, florecen y sobreviven de una generación a otra.
El enfoque evolucionista influyente en Enfermería del hospital, articulado a los patrones fundamentales del conocimiento establecidos por Carper evidencia el amplio radio del saber a partir de cuatro patrones: Empírico, Conocimiento Personal, Estético y Ético. El patrón Empírico expresado en múltiples hechos, descripciones de eventos u objetos que a partir de las hipótesis derivadas de la observación y la formación inicial que tenían las primeras enfermeras forjadoras de la historia del hospital; el patrón del Conocimiento Personal, donde la clara visión, seguridad y posicionamiento que querían se unificaba al conocimiento de sí mismo para lograr que la relación con los otros se fortaleciera en el actuar, interrelacionar, discutir, intervención, respeto y responsabilidad profesional por el bienestar del otro; Patrón Estético, su arte aprendido y aplicado en el conocimiento práctico que tenían ante una situación o cuidado particular, finalmente, el patrón más relevante a nuestro parecer, el Patrón Ético, relevante en las múltiples acciones que involucran descripciones de obligaciones morales, fines deseados, valores morales y no morales. Este conocimiento que constituye la ética de enfermería es generado por investigaciones éticas centradas en la identificación y análisis de las creencias y valores albergados por los individuos.
FOTO 008 Hospital Universitario del Valle
La Enfermería en el Hospital ha interactuado con comportamientos humanos en todos sus aspectos, probablemente ha sido el motivo que le ha permitido explicarse a sí mismo a partir de las teorías pluralistas actuando en un sistema abierto, que se influencia y responde a la sociedad todo el tiempo al igual que los patrones del conocimiento se interrelacionan y surgen de la totalidad de la experiencia. Han incidido de manera importante el Modelo de Adaptación de Calixta Roy, El Modelo de los Sistemas de Betty Newman, El Marco Sistémico y Teoría de la Consecución de Objetivos de Imogene King, la Teoría del Proceso de Enfermería de Ida Jean Orlando y la Teoría de Filosofía y ciencia del cuidado de Jean Watson.
Estos enfoques que surgen en el hospital hacia mediados del año 1980 y se intensifican a partir de 1990, se integran por la jefe del Departamento de enfermería María Elena Quevedo, enfermera y abogada que inicia cuando la Enfermería interrelaciona su hacer, su conocimiento y práctica con otras disciplinas diferentes a la salud. El hospital en este periodo se caracteriza por el fomento de la máxima utilización de los recursos tecnológicos y de infraestructura, para orientar sus servicios a los grupos más vulnerables, y en el país se inician los procesos de descentralización de la política en salud (ley 10 de 1990). La salud se fortalece como un servicio público que incluye la prevención, curación y rehabilitación, y es un resultante de orden intersectorial que descentraliza decisiones y recursos financieros. El hospital entonces cambia su denominación de hospital público a Empresa Social del Estado y se introduce la gerencia como elemento regulador de los procesos planificadores y de administración de recursos. El hospital incursiona en Programas nuevos como Trasplantes de Órganos y Tejidos, Terapia Enterostomal y Soporte Nutricional, Programa de la Madre Acompañante, Programa Todo Corazón, Programa de Atención en Casa a Pacientes de Ortopedia (que en julio de 2005 diversifica su atención a pacientes de todas las especialidades médicas). Se remodela y adecuan nuevas áreas físicas, se adquiere y adecua según la necesidad del paciente nueva tecnología sumada a la formación de enfermeras en las nuevas especialidades ofertadas por la Universidad del Valle como Neonatología (Betzaida García, Maria Eugenia Acevedo, Diana España). Salud Familiar (Manuela Mera, Carmen del Pilar Thorpt) y Nefrología (Esperanza Londoño, Claudia Valdez), se posiciona el cuidado de enfermería en la Unidad de Cuidados Intensivos del Recién Nacido, Unidad de Diálisis y Trasplantes, Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos y Adultos, siendo modelos a tomar por clínicas que surgían en la ciudad. Este periodo de gran producción y organización logística de la especialidad clínica articulada a la administración, conducen a la cultura del desarrollo del Hospital como organización socialmente responsable, con misión y valores éticos, de planeación y evaluación estratégica, productividad y desarrollo sostenible que llevan a procesos de reestructuración del recurso humano del hospital y el 23 de marzo de 2000 originan el cierre del Departamento de Enfermería bajo la dirección de la enfermera Elsa Escobar, excelente líder profesional y humana, quien pese a todas sus acciones de continuidad no logró la continuidad del proceso del cuidado dirigido por el departamento de enfermería. Como diría Bergson: “piensan como hombres de acción y actúan como hombres de pensamiento”. Solo que su pensamiento y su acción se distinguen porque el líder sabe muy bien y lo inculca en sus colaboradores que están allí para amar, servir, comprender, promover, crear, mejorar, liberar y desarrollar al hombre y a la sociedad De manera alterna se inicia para Enfermería otro reto o transformación, especialmente para el equipo de coordinadoras de enfermería: la formación en Administración y Gerencia en servicios de salud, que le permitan a enfermería programar el cuidado de la persona enferma a partir de procesos y procedimientos que respondan a la calidad, eficiencia y eficacia en el servicio, en donde la práctica previamente concebida como espacio para la demostración de habilidades se fortaleciera adicionando espacios diseñados para recrear y confrontar marcos teóricos con miras a su validación o reconstrucción. En este nuevo enfoque de administración sistemática, Enfermería continúa su ruta en pro del cuidado al enfermo y es así como se crean cargos de subdirectores de unidades de servicios liderados por enfermeras, inicialmente Maria Victoria Sandoval, posteriormente Carmen del Pilar Thorpt y Amanda García Lenis, personas innovadoras, responsables y con alto sentido táctico para asumir sus nuevas experiencias.
FOTO 009 Primer Encuentro de Enfermeras Fundadoras del Hospital Universitario del Valle con el Grupo de Enfermeras Coordinadoras, evento realizado por la Enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado en el Hospital en Octubre 20 de 2006
Durante estos 56 años del Hospital, el progreso de enfermería ha sido único y aceleradamente fenomenal, que ha vivido diversos enfoques como organización y ha aceptado las diferencias si se compara con otras ciencias como también la adaptación de la singularidad de enfermería y las capacidades de sus eruditos para desarrollar conocimiento. El o la Enfermera/o en el Hospital ha cotejado según el momento con diversas percepciones, experiencias, múltiples realidades, apariencias y fenómenos que en este centro de vida ha permitido a enfermería trazar su propia ruta a partir de premisas de conceptos viejos y conceptos nuevos.
La tendencia actual del Sistema General de Seguridad en Salud, ha generado un pensamiento crítico y analítico contextualizado con la realidad del país, el equipo de enfermería del hospital debe liderar procesos de cambio partiendo de lo histórico a lo moderno y es probable que la realidad esperada de prestar el servicio del cuidado de enfermería a la comunidad, realmente responda al perfil epidemiológico de ella como seres humanos que se unen al esquema metodológico de participación-acción y donde exista el espacio para las experiencias, reflexiones y criticas que no desvirtúen que el acto del “Cuidado de Enfermería” es el ser y esencia del ejercicio de la profesión, la cual siempre debe mantener sus principios de universalidad, individualidad, humildad, ritmos alternantes, paciencia, compromiso, creatividad y presencia auténtica en todos los escenarios en que actúe y se exprese con patrones del conocimiento científico, ético, personal y estético moldeables constantemente en la práctica de la asistencia, docencia e investigación.
FOTO 010 Tarta del 50 cumpleaños
El Hospital del siglo XXI que hoy cuenta con 725 camas, lo dirige la Enfermera Maria Lucero Urriago y lo consolidan como el más grande del país en el sector público, articulado al desarrollo de Enfermería a partir de modelos conceptuales y/o teorías de enfermería en la atención, además ha permitido que los profesionales compartan el lenguaje en la orientación y aplicación de los cuidados con calidad, autonomía y visibles por sí mismo en la coherencia y cohesión del conocimiento con la práctica disciplinar desde la docencia, la asistencia y la investigación, como hilo conductor que ha generado y contribuido con la identidad de la profesión en el hospital, ha permitido y fortalecido el colegaje inter y extra institucional, con liderazgo y valores éticos que garantizan la aplicación de un cuidado humanizado, integral, continuo y de calidad centrado en las necesidades de la persona enferma, familia o colectivo. Las Enfermeras del ayer fueron precursores del Modelo de Atención y la Disciplina de Enfermería. Hoy en el Hospital Universitario del Valle, las Enfermeras son utilizadas como fuente y recurso del conocimiento de enfermería; deben continuar, transformar, moldear y proponer no “sólo el cuidado de los pacientes, sino también sobre las políticas que orientan al cuidado de la salud.
Es el desarrollo de la investigación, la docencia, la teoría y el conocimiento basado en la práctica lo que impactará en el cuidado de los pacientes, es la conexión entre estas áreas lo que fortalece y posiciona un cuidado humano con calidad y seguridad que vaya más allá y trascienda en el cambio de políticas del cuidado, bien expresados por Elizabeth Murrain Kudson, en sus escritos sobre trascender en el cuidado de enfermería. Hoy la Enfermería, en el hospital tiene toda la experiencia y conocimiento para proponer, definir e implementar un modelo único de cuidado humano que lo identifique en su forma de actuar, lo posicione en el campo de la ciencia y lo articule a los convenios de docencia y servicios existentes.
FOTO 011 Enfermera Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
AGRADECIMIENTOS
Con sentimientos de admiración y aprecio a todas y cada una de las primeras enfermeras del Hospital Universitario del Valle: Bertha Franco, Lilia Díaz de Osorio, Alida Sanchez Prado, Ana Rosa Herrera, Ana Rivera, Aura Bedoya, Blanca Elena Córdoba, Graciela Chavez, Lilia Díaz, Lilian Holzinger, Fanny Delgado, Iobar Gómez, Esther Restrepo, Sor Leonor García, Sor Gilma Gallego y Sor Bertha Valencia, enfermeras docentes de Enfermería de la Universidad del Valle y Universidad Santiago de Cali, colegas y amigas del Hospital Universitario del Valle, a todos por su valioso aporte en datos biográficos y entrevistas concedidas.
AGRADECIMIENTO ESPECIAL
Carmen del Pilar Thorpt Hurtado
FOTO 012 El Hospital Universitario del Valle "Evaristo García". E.S.E se encuentra ubicado en la ciudad de Cali, departamento del Valle del Cauca en Colombia.
Manuel Solórzano Sánchez
Enfermero Hospital Donostia. Osakidetza /SVS
Vocal del País Vasco de la SEEOF
Miembro de Eusko Ikaskuntza
Miembro de la Sociedad Vasca de Cuidados Paliativos
Miembro Comité de Redacción de la Revista Ética de los Cuidados
M. Red Iberoamericana de Historia de la Enfermería
masolorzano@telefonica.net
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