Foto 1 La chica con el bebe en la cocina de Jean Baptiste Chardin
María Martínez. Enfermera. Fue la primera enfermera de la que hay constancia en los Hospitales de Antezana y Santa María de la Rica de Alcalá de Henares en la provincia de Madrid. Además, no era monja, no pertenecía a ninguna orden religiosa, si no que era una enfermera preparada y formada.
Su puesto en el hospital se crea para mantener la intimidad de la mujer. Fue entonces en 1576 cuando se decide que las salas donde debían estar ingresadas las personas debían de estar divididas por género, no entrando hombre alguno en las salas de mujeres, a excepción del médico y del cirujano.
La enfermera se encargaba de cuidar a las enfermas con todo esmero, cambiar las sábanas y almohadas y aplicar el medicamento que hubiera dictado el físico, tras la elaboración del boticario.
El primer salario de enfermera documentado en el Hospital de Santa María de la Rica de Alcalá de Henares, en 1576, está a nombre de María Martínez y cobraba 8 reales al mes. Sorprendentemente, tuvo la misma remuneración que los hombres.
En las “Constituciones de la Real Casa y Hospital de San Antonio de los Alemanes” en Madrid, en el año 1744, escribía sobre cómo debe ser la enfermera: “una muger de buena edad y salud, caritativa, limpia y vigilante y que sepa guiar con acierto para que sean bien tratados los peregrinos y para que logren los enfermos el regalo que tanto necesitan”.
La Enfermera cobraba 1.460 reales de vellón al año, más beneficios sociales, como la casa, comida, etc.
Cuatro mujeres que formaron parte del Hospital de Antezana como protagonistas en diferentes momentos históricos. Un ejemplo del papel femenino en una Institución fundada en 1483 por don Luis de Antezana y doña Isabel de Guzmán. Ya hemos comentado el de la enfermera María Martínez
María de Molina. Administradora. Fue la primera administradora de una Institución en Alcalá de Henares. Fue en 1759 y estuvo 15 años al frente de la administración del Hospital de Antezana. Sus cuentas anuales, asientos de gastos y revisión de rentas y censos son los más perfectos y detallados de cuántos se conservan en el archivo en 500 años de historia. El Vicario General del arzobispado de Toledo no toleró esta presencia y que una mujer le prohibiera comprobar las cuentas, por lo que decidió entrar por la fuerza en el archivo y llevarse numerosa documentación. Esto provocó una queja del Hospital de Antezana al Consejo Real, que respondió dando la razón al Hospital y otorgando nuevas constituciones en 1764.
Elvira López. Mecenas. Mujer de Jorge de Villegas, fue un matrimonio que colaboró activamente con el Hospital de Antezana. En 1564, Elvira López entró como cofrada en Antezana y ayudó con sus rentas a construir una nueva sala de convalecientes en la parte superior o galería, cerrada desde entonces. Donó toda su hacienda al Hospital de Antezana, 12.000 mrs de cargas de pan al año para pobres, y dejó también a su médico personal al servicio del Hospital de Antezana para ayudar al otro médico titular sin coste alguno. Fue enterrada en la antigua parroquia de Santa María.
Isabel González. Enfermera. Fue enfermera entre los años 1620 a 1630 en el Hospital de Antezana de Madrid. Queda constancia de que aprendía el oficio de otra enfermera con experiencia, puesto que ya en aquella época se jubilaban con un salario que pagaba el Hospital de Antezana a cambio de enseñar el oficio a las nuevas enfermeras.
Además, se le facilitaban clases para aprender a leer y a escribir, algo poco común en aquella época. Hay registros documentales en los que queda constancia de que no sabía firmar, aunque en otros posteriores ya aparece su firma, lo que confirma el cuidado con que se trató siempre a los empleados del Hospital de Antezana, tuvieran el puesto que tuvieran (1).
Foto 2 Hospital de Antezana en Alcalá de Henares
La Fundación Antezana gestiona el antiguo hospital de Nuestra Señora de la Misericordia de Alcalá de Henares desde 1483
Don Luis de Antezana, regidor de la villa de Guadalajara y su esposa doña Isabel de Guzmán, de la casa noble de Medina Sidonia para el cuidado de los pobres, enfermos y peregrinos, vivieron en el siglo XV en la entones villa arzobispal de Alcalá de Henares. Ambos pertenecían a la nobleza urbana de la época.
Don Luis, caballero doncel del rey, era amigo personal del arzobispo Alfonso Carrillo de Acuña; doña Isabel, pertenecía a la ilustre familia de los Guzmanes. La creación de instituciones de caridad para socorrer a los pobres era una práctica habitual por parte de las familias ricas y muy religiosas de la Edad Media. Parece ser que Luis de Antezana participó de manera activa en la política de la época, colaborando en la proclamación de Isabel como reina de Castilla.
Aunque lo más importante, y por lo que han pasado a la historia, no es lo que hicieron en vida, sino su voluntad de dejar tras su muerte parte de su riqueza a una fundación que se ocupara de los más necesitados (2).
Foto 3 Mujer de la época sobre el año 1500
18 de octubre de 1483
En su testamento, fechado en Alcalá de Henares el 18 de octubre de 1483, donaron gran parte de su fortuna para la creación de una casa de acogida de enfermos, bajo la advocación de Nuestra Señora de la Misericordia, casa de acogida y hospital de caridad que, regido por una cofradía de caballeros, ha sobrevivido más de cinco siglos, considerándose el más antiguo de Europa en funcionamiento. Ambos se encuentran enterrados en la iglesia del antiguo hospital (2).
En Alcalá existieron otras casas de beneficencia, como el Hospital de Santa María la Rica, que funcionaba desde 1312. Luego se crearía el de San Julián y, más tarde, los instituidos por el cardenal Cisneros: el de San Lucas, para estudiantes, y el de mujeres pobres.
Francisco Jiménez de Cisneros y llamado Cardenal Cisneros, representado como fundador del Hospital de la Caridad de Illescas en 1510 e inmortalizado en una pintura por Alejandro Ferrant (1892).
Creo la profesionalización de los médicos, boticarios y enfermeros; bebían de los postulados humanistas, y conceptos como la dignidad y la técnica (2).
La fundación de Antezana fue más humilde y sencilla y desde sus primeras constituciones sólo atendió a doce enfermos, de forma física y espiritual, siendo su reducido número de camas el motivo por el que se le apodó cariñosamente con el nombre de “el hospitalillo”.
El Hospital de Antezana es vecino de la Casa de Cervantes, y su visita se puede encadenar con la casa del insigne escritor dentro de un paseo por la calle Mayor, donde estaba el barrio judío medieval. Precisamente, el Hospital de Antezana está enfrente del actual pasadizo a lo que era la Sinagoga Mayor.
Foto 4 Título oficial de sangrador expedido en 1795
El Hospital de Antezana ha sido atendido por las monjas de la Orden de las Siervas de María hasta marzo de 2006. En la actualidad se gestiona por la propia institución y la dirección de la residencia.
Para administrarlo, los fundadores crearon un Cabildo o junta de nueve caballeros hidalgos complutenses, el cual sigue existiendo como Patronato de la Fundación. Las administraciones públicas desde hace años han invertido ayudas para su mejora y rehabilitación, como la obra realizada en 2010, con la que las personas atendidas pasaron de 12 a 23. Hace pocos meses se ha adquirido el edificio sito en la calle Imagen número 10 a fin de ampliar la demanda de residentes.
El Hospital de Antezana de Alcalá de Henares está en lo que fue el palacio donde vivían sus fundadores, que destinaron una parte importante del edificio a la institución, en la calle Mayor, extendiéndose hasta la calle paralela a esta, la de Santiago. La familia Antezana separó el Hospital de Antezana de sus aposentos, de forma que a este se le abrieron puertas y ventanas a la calle Mayor.
El edificio del Hospital de Antezana de Alcalá de Henares, junto con la Casa natal de Cervantes, es el único tramo donde no hay soportales de la calle Mayor, pues lo que había, en medio de la fachada del Hospitalillo, sobre la puerta, era un amplio balcón bajo un alero de estilo mudéjar, muy apreciado por los expertos. El alero todavía se puede ver, no así el balcón, que desapareció en 1800, cuando a la portada se le dio un estilo neoclásico.
Foto 5 Retrato de Miguel de Cervantes Saavedra
Rodrigo de Cervantes y San Ignacio de Loyola
Rodrigo de Cervantes, Zurujano sangrador de profesión (cirujano de cuota, es decir sin titulación), fue el padre de Miguel de Cervantes. Nació en Alcalá de Henares en 1509 y probablemente eligió su oficio influenciado por su madre, Leonor de Torreblanca, hija de un afamado médico cordobés. Era una mezcla de enfermero y sacamuelas que vivía de realizar sangrías, curar heridas de urgencia, poner emplastos, intentar desinflamar torceduras y golpes, hacer pequeñas suturas y afeitar barbas.
En el Museo Casa Natal de Cervantes en Alcalá de Henares (domicilio en consecuencia del matrimonio Rodrigo Cervantes – Leonor de Cortinas) se exhibe la “botica o cámara de Rodrigo de Cervantes”. Tratándose de un Zurujano, que fundamentalmente practicaba sangrías para extraer los malos humores, se observa en su casa un sillón adecuado para llevarlas a cabo y, por supuesto, lancetas y bacías. Se ven, igualmente, botes de farmacia de Talavera, orzas, cajas para píldoras y almireces. Con ello se hace referencia a que médicos y zurujanos de aquella época, en muchas ocasiones, elaboraban sus propios fármacos. La medicina de tradición galénica que se practicaba entonces consideraba que la enfermedad se asociaba al desequilibrio de los cuatro humores (bilis negra, bilis, flema y sangre) y para restablecer el equilibrio se recurría a los purgantes, lavativas y sangrías. Las sangrías eran incisiones que se hacían en varias partes del cuerpo, pero los purgantes y otros medios eran preparados por el mismo zurujano.
Foto 6 Instrumental de cirujano sangrador del siglo XIX. Foto cedida por la Fundación Index. Manuel Amezcua
Miguel de Cervantes en El Quijote recuerda de alguna manera la figura de su padre a través de Maese Nicolás (barbero, sangrador, cirujano, sanador y sacamuelas), que preparaba casi mágicos brebajes para curar dolores de cabeza y que acabaría atendiendo al famoso hidalgo tras haber sido apaleado en una de sus aventuras.
Es probable, que Rodrigo de Cervantes, debido a su situación económica y a la cercanía a su casa, trabajara en el antiguo Hospital de Antezana, en Alcalá de Henares, Madrid
También existe la relación entre Ignacio de Loyola y el Hospital de Antezana. Ignacio estudió en la Universidad de Alcalá de Henares entre 1526 y 1527. Residió primero en el antiguo Hospital de Santa María la Rica y más tarde en el Hospital de Antezana. Se conserva la cocina que usó como cocinero y el hueco de su habitación, ocupado en gran parte desde el siglo XVII por la cúpula de la capilla dedicada a él en la iglesia del hospital.
El edificio del ‘Hospitalillo’
La construcción posee una fachada retocada en 1904 en estilo neogótico, de la que sobresale un gran alero mudéjar.
La iglesia, de claro gusto barroco (siglo XVII y reformada en 1800), posee una cúpula encamonada y una bóveda de cañón que tapa el artesonado mudéjar original. De entre los lienzos de la capilla destacan un San Juan Bautista y un San José con el Niño, obras de Herrera Barnuevo.
Dos cuadros representan a San Ignacio: uno de Pedro Valpuesta, fechado en 1658, y otro de Diego González de la Vega, de 1669, en lo que fue antigua habitación del santo, hoy capilla dedicada en su honor.
Del conjunto de obras de arte que se sitúan en el templo, destaca la talla de Nuestra Señora de la Misericordia, obra con toda probabilidad del taller de Martínez Montañés (siglo XVII). Está policromada de manera magistral, hasta el punto de no haber sufrido prácticamente retoques en los casi cuatro siglos que han pasado por ella (2).
Foto 7 Francisco Jiménez de Cisneros, representado como fundador del Hospital de la Caridad de Illescas en 1510 e inmortalizado en una pintura por Alejandro Ferrant, 1892
Bibliografía
1.- Cuatro mujeres en la historia del Hospital de Antezana.
Fundacionantezana.es/cuatro-mujeres
https://www.fundacionantezana.es/cuatro-mujeres-en-la-historia-del-hospital-de-antezana/
2.- Texto cedido por la Fundación Antezana
Bacía
Se llamaba bacía a la vasija cóncava y grande, de metal o de barro, ancha, redonda u ovalada y, por lo general, con una escotadura semicircular en el borde (para encajarse en el cuello del cliente). El uso más común lo tenía en las barberías, como recipiente de la espuma para humedecer y jabonar la barba y para sangrías. (Del latín medieval bacia). Real Academia de la Lengua Española.
Foto 8 Bacía. Don Quijote de la Mancha con la bacía puesta sobre su cabeza
Real Pragmática dictada en Segovia por los Reyes Don Fernando y Doña Isabel, el 9 de abril de 1500, que consta en la ley 8.ª, título XI, libro 8.º, tomo 4.º de la «Novísima Recopilacion de las leyes de España», cuyo tenor es como sigue:
Exámen de los barberos, y pena de los que sin este requisito pusieren tienda para sangrar y hacer las demás operaciones que se expresan.
Mandamos, que los Barberos y Examinadores mayores, de aquí adelante, no consientan ni den lugar que ningún barbero, ni otra persona alguna, pueda poner tienda para sajar ni sangrar, ni echar sanguijuelas, ni ventosas, ni sacar dientes ni muelas, sin ser examinado primeramente por los dichos maestros Barberos mayores personalmente.
Barberos Sangradores
Siguiendo la normativa de abril de 1500 de los Reyes Católicos, Alonso Muñoz, en su Instrucción de los Barberos Flobotomianos describe sus funciones:
“Consiste el arte del Barbero Flobotomiano, y es su oficio sangrar, sajar, echar ventosas, y sanguijuelas, y sacar dientes y muelas: para lo cual conviene que el Barbero Flobotomiano tenga muy buena herramienta, y lo demás necesario como es (…) herramienta de muelas (…).
Así mismo el barbero ha de ser limpio, liberal, de buena vista y callado, y finalmente de mucha confianza”. Fuente Granjel, 1978
Foto 9 Hospital de Antezana el sueldo de los enfermeros y enfermeras era el mismo para los dos sexos, ocho reales al mes. 1622
Otra Bibliografía
1.- Barberos y Otros Oficios. Raúl Expósito González, Jesús Rubio Pilarte y Manuel Solórzano Sánchez. Publicado el domingo día 20 de noviembre de 2011
http://enfeps.blogspot.com/2011/11/barberos-y-otros-oficios.html
2.- Barbero, Cirujano, Dentista, Sangrador en Gipuzkoa. Manuel Solórzano Sánchez. Publicado el lunes día 9 de febrero de 2015
http://enfeps.blogspot.com.es/2015/02/barbero-cirujano-dentista-sangrador-en.html
3.- Manual Instructivo para “El Barbero de Pueblo” 1877. Manuel Solórzano Sánchez. Publicado el lunes 18 de enero de 2016
http://enfeps.blogspot.com.es/2016/01/manual-instructivo-para-el-barbero-de_18.html
Enciclopedia Wikipedia
Manuel Solórzano Sánchez. Grado en Enfermería
Manuel Solórzano Sánchez - Wikipedia, la enciclopedia libre
https://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Sol%C3%B3rzano_S%C3%A1nchez
Día 20 de octubre de 2022, jueves
Manuel Solórzano Sánchez. Entziklopedia en Euskera
https://eu.wikipedia.org/wiki/Manuel_Sol%C3%B3rzano_S%C3%A1nchez#Ibilbidea
Día 27 de octubre de 2022, jueves
Manuel Solórzano Sánchez
Graduado en Enfermería. Enfermero Jubilado
Insignia de Oro de la Sociedad Española de Enfermería Oftalmológica 2010. SEEOF
Premio a la Difusión y Comunicación Enfermera del Colegio de Enfermería de Gipuzkoa 2010
Miembro de Enfermería Avanza
Miembro de Eusko Ikaskuntza / Sociedad de Estudios Vascos
Miembro de la Red Iberoamericana de Historia de la Enfermería
Miembro de la Red Cubana de Historia de la Enfermería
Miembro Consultivo de la Asociación Histórico Filosófica del Cuidado y la Enfermería en México AHFICEN, A.C.
Miembro no numerario de la Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País. (RSBAP)
Académico de número de la Academia de Ciencias de Enfermería de Bizkaia – Bizkaiko Erizaintza Zientzien Akademia. ACEB – BEZA
Insignia de Oro del Colegio Oficial de Enfermería de Gipuzkoa. Años 2019 y 2022
Sello de Correos de Ficción. 21 de julio de 2020
Sello de Correos. 31 de diciembre de 2022
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